A pie. Así recorren las calles los más de 800 trabajadores de Seguridad Ciudadana de Trujillo, luego de la sorpresiva disposición del alcalde Arturo Fernández Bazán de retirar las camionetas y motocicletas del servicio de patrullaje.
La orden llegó a la base de Seguridad Ciudadana pasada las ocho de la noche del martes 10 de enero. Las 35 camionetas operativas empleadas para recorrer los 59 territorios vecinales fueron internadas en el local municipal de la urbanización Torres Araujo.
Trabajadores municipales que conversaron con Buenapepa sostuvieron que no recibieron explicaciones sobre esta medida.
El secretario del Sindicato de Trabajadores de Seguridad Ciudadana (Sitrasec), Carlos Bocanegra Ávalos, cuestionó la disposición de la municipalidad pues considera que esta afecta el servicio de patrullaje en el distrito de Trujillo.
“Hasta ahora el alcalde no explica las razones del porqué ha quitado las camionetas del patrullaje. En forma burlona dice que llevemos nuestras bicicletas para patrullar. El señor cree que nosotros pertenecemos a un partido político, creo que tiene un problema personal o político con el señor César Acuña. Nosotros no pertenecemos a ningún partido político”, sostuvo.
Son 820 trabajadores de Seguridad Ciudadana que desde hace dos días patrullan a pie en las zonas cercanas al centro de Trujillo. Las 35 camionetas empleadas en el patrullaje no saldrán a las calles hasta nuevo aviso.
¿Y ahora qué?
Según contó a este medio Gerardo Reyes Torres, presidente de la asociación de alcaldes vecinales, más de la mitad de territorios vecinales de Trujillo no cuentan con personal municipal patrullando las calles.
En el sector Mampuesto, territorio vecinal n.◦ 56, que limita con el distrito de Florencia de Mora y del que es alcalde vecinal, no cuenta con personal de Serenazgo porque no tienen acceso a los vehículos para trasladarse.
Lo mismo pasa con los territorios vecinales de Pesqueda, La Rinconada, Libertad, El Cortijo, entre otros, que registran asaltos y otros incidentes que alteran el orden público.
“Para que el personal se traslade hasta el sector Mampuesto, en el límite con Florencia de Mora, tienen que movilizarse, pero no pueden venir. Lo mismo pasa en Pesqueda, Santa Sofía, Libertad, Chimú, La Marquesa. Es un tema muy complicado. Trujillo se ha convertido en tierra de nadie. El alcalde ha empezado con el pie izquierdo. Si bien es cierto hay que ejecutar una reingeniería en esta gerencia municipal, pero no puede atacar a todos”, declaró Reyes.
Agregó que solo los sectores más cercanos a la base de Seguridad Ciudadana, ubicada en el cruce de la avenida 29 de Diciembre y la calle Paraguay, en la urbanización Torres Araujo, cuentan con personal de Serenazgo, el resto sufre por la disposición del alcalde de retirar las unidades motorizadas del servicio preventivo de vigilancia en las calles.
“Los serenos salen desde la base en Torres Araujo. Esa urbanización, El Recreo, La Perla y otras más no tienen muchos problemas; pero el problema se agrava conforme con los sectores más alejados. Todos los días hay incidentes con gente que ha convertido los parques en cantinas, peleas, etcétera. Esta medida perjudica a todos. También les han quitado su radio a los serenos. Con eso al menos se pueden comunicar con su base. Ahora ni eso tienen”, alertó.
Andá pa allá, bobo
El primer regidor Mario Reyna Rodríguez dijo desconocer esta disposición municipal ordenada por Arturo Fernández, aunque se mostró a favor de que el personal de Seguridad Ciudadana patrulle a pie los sectores de la urbe.
“No me toma por sorpresa la medida. Lo que sí me preocupa es que la ciudadanía reciba un buen servicio. Si hay una disposición para que patrullen a pie, seguro obedece a que haya un contacto más directo entre el personal y la población. Desconozco a qué estrategia responde esto”.
Al ser consultado sobre las limitaciones que tiene el personal municipal para patrullar sin vehículos las zonas más alejadas, Reyna Rodríguez dijo que la municipalidad tendrá que “plantear alternativas para una mejor distribución de los trabajadores”.
Además, el teniente alcalde calificó de “bobos” a los que creen que esta medida tiene la intención de perjudicar a los ciudadanos. “Les diría a esas personas que lanzan esas aseveraciones que hay que ser bien bobos para creer que se quiere hacer daño al vecino. Las acciones que se están tomando son para mejorar y optimizar, que los trabajadores se sientan orgullosos de llevar el uniforme municipal”, sostuvo.