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Mes del Orgullo: derribando 3 mitos que laceran a la comunidad LGTBIQ+

Junio es el mes del Orgullo Gay. A los largo de la historia, las personas homosexuales han recibido inconcebibles ataques.

Entre el 2012 y 2021, el Ministerio Público —en su informe Características criminológicas de las muertes dolosas de personas LGTBIQ+— reportó 84 denuncias vinculadas a muertes de víctimas LGTBIQ+. El 68.9 % de los registros mostró posibles indicios de Violencia Basada en Prejuicio (VBP).

Según la primera encuesta del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) a la comunidad LGBTIQ+ (2017), el 56,5 % de la población teme expresar su orientación sexual y/o identidad de género.  

Este dato se apoya en el temor a sufrir actos homofóbicos, debido a que el 62,7 % fue agredida y discriminada en espacios públicos y educativos. Los principales victimarios son compañeros y líderes religiosos. 

Así mismo, el 46,6 % que denunció estos actos, indicó que el agresor no fue penalizado. 

Por ello, es importante desmentir mitos históricos que han perpetuado varios estereotipos en la ciudadanía peruana. Antes, revisemos el origen.

El génesis discriminatorio

Según el libro Libertad y prejuicio (2021), en 1960 surgió el primer significado de homofobia como “el temor de estar cerca de los homosexuales”.

Hoy, la homofobia incluye la discriminación, el desagrado, la estigmatización, el rechazo, los prejuicios y la negación de los derechos en contra de la comunidad LGBTIQ+.

Este dato se apoya en el temor a sufrir actos homofóbicos, debido a que el 62,7 % fue agredida y discriminada en espacios públicos y educativos. Los principales victimarios son compañeros y líderes religiosos. 

La homofobia se presenta cuando el Estado limita los derechos básicos (salud, educación, política, etc.) y se tolera la violencia. Pero existe una homofobia imparable; la que proviene de la iglesia y la vida cotidiana.

Este tipo de discriminación es más grave porque es normalizada mediante burlas, humillaciones, comentarios denigrantes por redes sociales y bromas por parte de amigos y parientes. Se aprende desde el núcleo familiar casi como respirar.

Es importante aclarar que la palabra homofobia se aplica para todas las orientaciones sexuales que incluye la comunidad LGBTIQ+.

Así mismo, la diversidad sexual se origina a partir de la naturaleza humana, donde la orientación sexual adquiere una gama de posiciones. La genética y biología juegan un papel en cómo se desarrolla este tema.

Orgullo

“La homosexualidad es una manifestación biológica más de la sexualidad, un fenotipo sexual como cualquier otro, que aparece en muchas otras especies no humanas”, afirma Diego López Alfonso (2014), reconocido biólogo almeriense que explica la diversidad sexual con evidencias científicas.

Respetar la diversidad es un reto embarazado de ignorancia. Según un informe de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (2020), 67 países de las Naciones Unidas sancionan los actos sexuales entre personas gay. Además, solo la séptima parte, de 193 estados, admite el matrimonio homosexual.

En 2015, el congreso peruano debatió el proyecto de ley sobre la unión civil. Las participaciones fueron paupérrimas. Se terminó rechazando la iniciativa. Un parlamentario citó a Hitler para nombrar a la homosexualidad como inconducta.

Por otra parte, durante el siglo XX, movimientos feministas y de derechos humanos comenzaron a cuestionar las desigualdades sociales.

Su lucha implicaba el enfoque de género que se basa en la idea de que el género no es solo una cuestión biológica, sino una construcción social que influye en nuestro accionar.

En 2015, el congreso peruano debatió el proyecto de ley sobre la unión civil. Las participaciones fueron paupérrimas. Se terminó rechazando la iniciativa. Un parlamentario citó a Hitler para nombrar a la homosexualidad como inconducta.

En Perú, este asunto ha sido descartado de los currículos educativos para impedir que se visibilicen los principios de la comunidad LGBTIQ+. Como es costumbre, los grupos conservadores se nutren del miedo y atentan contra la educación.

Un país educado no puede ser engañado. Una población educada no se vuelve fanática de creencias retrógradas; cuestiona, piensa y defiende la libertad y el proyecto de vida de cada ciudadano.

Leer más: Plumofobia: los gays también discriminan

En la misma línea, la identidad de género se refiere a cómo una persona se percibe a sí misma en términos de género, es decir, si se ve como hombre, mujer, una mezcla de ambos, o ninguno. Esta íntima convicción puede coincidir con el sexo biológico o puede diferir de él.

Actualmente, debemos entender la diversidad sexual como parte natural y saludable de nosotros. La aceptación y el respeto por esta diversidad no solo promueve el bienestar individual, sino que enseña a toda la sociedad a valorar las diferencias y la inclusión.

Enseñar o saber enseñar

Según un estudio de la población LGBTIQ+ en Perú, elaborado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (2023), desde 2003 se han aprobado regulaciones para garantizar un sistema educativo inclusivo, no discriminatorio y libre de violencia. Sin embargo, la aplicación de estas normas ha sido ineficiente.

El Ministerio de Educación (Minedu) aplicó la Estrategia Nacional para Combatir la Violencia Escolar Paz Escolar 2013-2016 para contrarrestar el problema de la violencia escolar.

Como táctica, el Minedu creó el Sistema Especializado de Denuncia de Casos de Violencia Escolar SíseVe, que incluía una plataforma en línea para que víctimas o testigos reporten casos.

A pesar de estos pequeños avances, las escuelas no han implementado acciones para combatir el abuso contra personas LGBTQI+, que es frecuente.

En una encuesta sobre las experiencias escolares de hombres jóvenes de 18 a 24 años, el 44 % mencionó haber sufrido acoso homofóbico en el colegio.

Entre el 5.5 % de los encuestados que se identificaron como no heterosexuales, el porcentaje que señaló haber sido intimidado fue de 68 %. Este dato evidencia un mayor impacto del acoso homofóbico entre los alumnos con una orientación diversa.

En 2017, el país presentó el Currículo Nacional para la Educación Básica Regular, que incluía enfoques de género diverso. Sin embargo, este plan de estudios fue obstaculizado por grupos conservadores, quienes alegaban que buscaba «homosexualizar» a los estudiantes.

Orgullo: demoliendo 3 mitos

El fanatismo religioso ha instalado en la mente de las personas uno de los mitos más antiguos y creídos fielmente por la población: “La homosexualidad es cosa del diablo y representa el pecado”.

Estas ideas provienen de líderes religiosos desinformados y que cultivan el miedo mediante sermones que asustan a padres de familia y los obligan a maltratar y excluir a sus hijos si se consideran homosexuales.

Gran parte de sus argumentos se encuentran en la biblia: “No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones […] heredarán el reino de Dios” (1 de Corintios 6:9-10) o “Si alguno se ayuntare con varón como con mujer, abominación hicieron; ambos han de ser muertos” (Levítico 20:13).

El fanatismo religioso ha instalado en la mente de las personas uno de los mitos más antiguos y creídos fielmente por la población: “La homosexualidad es cosa del diablo y representa el pecado”.

No reconocer que cada persona tiene el derecho de vivir conforme a su propia visión del mundo y asumir que la moral y las creencias religiosas de la mayoría deben imponerse es una falacia que transgrede la libertad de desarrollo individual en un país laico, según la Constitución que rige. 

Este mito ha traído casos de violencia y asesinato justificados por esta mentira de grueso calibre. En el 2019, Quelly Da Silva, una mujer transgénero, fue asesinada en Brasil. De acuerdo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el homicida la mató por considerarla “un demonio”.

Priscila Rodríguez, directora de la ONG Derechos de las personas con discapacidad internacional (DRI), narra que en zonas rurales guatemaltecas se han perpetrado infanticidios porque se cree que poseen una maldición.

Otro mito es que “la homosexualidad no debe ser aceptada por ser antinatural”. Yuval Noah Harari, gran intelectual, derriba esta creencia y aclara que se confunde lo naturalmente aceptado con lo mayoritario y común. Por ello, los abanderados de este mito se adhieren a que la homosexualidad al ser poco frecuente, es antinatural. 

En Sapiens: De animales a dioses explica lo siguiente: 

“Desde una perspectiva biológica nada es antinatural, ya que todo lo que es posible es por definición también natural” (p. 133).  

Según Hannah Gadsby, famosa activista y comediante, esta creencia es una historia inventada que ocasiona varias dificultades para desarrollarse con libertad: 

  • Llena de vergüenza y odio a un niño que pasa por un momento de exploración.
  •  Se consolida una autonegación a tu propia orientación sexual. 

En tercer lugar, está el mito de que “las personas homosexuales son anormales y deben curarse”. 

El viernes 10 de mayo de 2024, el Perú retrocedió treinta años de desarrollo inclusivo. El Ejecutivo aprobó el Decreto Supremo N° 009-2024-SA que califica como trastorno mental la diversidad sexual, lo que ha desencadenado distintas polémicas en torno a su validez. 

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La exclusión de la homosexualidad de la Clasificación Internacional de Enfermedades de la OMS ocurrió hasta 1992 con la CIE-10. Respecto a la transexualidad, se consiguió con la publicación de la CIE-11 en 2019.

¿Por qué Perú persiste en imponer medidas extinguidas frente a normas internacionales?

El principal peligro de este modelo “rehabilitador” es el internamiento en contra de tu voluntad. 

La CIDH comunicó que las personas LGBTIQ+ siguen siendo maltratadas y obligadas a terapias de conversión para “curar”. Medidas como el reciente decreto, son utilizados para someter a personas LGBTIQ+, principalmente la comunidad trans, a:

  • Esterilizaciones forzadas 
  • Cirugías sin consentimiento 
  • Aplicaciones hormonales de modo coercitivo 

Más Igualdad (2019), organización que trabaja por la visibilidad y los derechos LGBTIQ+, elaboró un estudio sobre dichas prácticas y encontró que: 

  • El 40 % de los encuestados fue sometido a sesiones de conversión con la finalidad de cambiar su orientación sexual e identidad de género. 
  • El 5 % fue internado 
  • El 62 % fue víctima cuando era menor de edad.  

Shely Cabrera, responsable de Incidencia del Programa de Sexualidad y Autonomía Física de la organización feminista Manuela Ramos, enlista las amenazas de validar que otras orientaciones sexuales sean tratadas como dañinas: 

  • Se incentiva más la difusión de discursos que atentan contra la dignidad, ya que grupos discriminatorios se podrán basar en la ley al decir que es una enfermedad.
  • En el caso de las personas trans, no serán respetadas y se las expondrá a ser llamadas por su nombre social y que no se les reconozca su identidad. 
  • Se encontrarán expuestas a ser sometidas a cualquiera de los Esfuerzos por Cambiar la Orientación Sexual e Identidad o Expresión de Género (ECOSIEG), como las terapias de conversión.
Johan Fiestas Chunga
Johan Fiestas Chunga
Desde muy chico abrazó su soledad para jugar y crear historias. Dice que el amor es imposible, pero es purito miedo al compromiso. Se enamoró del periodismo cuando le informó a la directora de su colegio sobre el bully del salón. Tiene calle por el barrio de su abuela materna y cultura por embutirse libros en vez de merendar. Se la da de antisocial, pero tonea como cumpleañero. Su fruta selecta es el kiwi de sabor agridulce como su infancia en Paita.