En un reciente operativo llevado a cabo por el equipo de Fiscalización de la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT), en la primera y segunda etapa de la urbanización San Isidro, se clausuró una panadería por atentar contra la salud pública y el ordenamiento urbano.
La panadería Varela, ubicada en la manzana I, lote 39 de la primera etapa de San Isidro, se encontró bajo la lupa de la Unidad Integrada de Fiscalización de la MPT.
Las denuncias de los vecinos llevaron a este cierre temporal de 30 días hábiles, una acción drástica motivada por múltiples infracciones que ponen en riesgo la salubridad y la seguridad de los consumidores.
Heces de roedores en panadería de urb. San Isidro
El hallazgo de excremento de roedores en el área de preparación de masa para la elaboración de panes fue solo la punta del iceberg en cuanto a las irregularidades descubiertas.
Además, se evidenció la ausencia de indumentaria adecuada por parte del personal, un grave descuido que puede ser un vehículo directo de contaminación alimentaria.
La subgerente de salud, Caroline Ávila, detalló las infracciones impuestas a la panadería Varela, destacando el incumplimiento de normativas cruciales para la operación segura de establecimientos alimentarios.
Entre estas, figuran la falta de certificados de limpieza y desinfección, la presencia de excremento de roedores, las condiciones insalubres del local y la omisión de elementos básicos de protección para el personal.
Entre estas infracciones, figuran la falta de certificados de limpieza y desinfección, la presencia de excremento de roedores, las condiciones insalubres del local y la omisión de elementos básicos de protección para el personal.
Las sanciones impuestas reflejan la gravedad de las irregularidades: desde multas económicas hasta la suspensión temporal de la actividad comercial.
La funcionaria edil indicó que estas medidas, aunque severas, son necesarias para garantizar la protección de la salud pública y reforzar los estándares de higiene en los establecimientos dedicados a la manipulación de alimentos.
Trujillo: negocios invaden la vía pública
Pero la intervención municipal no se limitó a la inspección de establecimientos comerciales. En la segunda etapa de la urbanización San Isidro, se llevó a cabo un decomiso de pizarras y carteles que invadían áreas públicas, una práctica común entre bodegas y restaurantes que buscan expandir sus negocios a expensas del espacio destinado al tránsito peatonal y vehicular.
El gerente de Desarrollo Económico Local de la MPT, Luis Verdi, lideró esta operación destinada a restablecer el ordenamiento urbano y la seguridad ciudadana.
La invasión de veredas y espacios municipales con mobiliario y estructuras comerciales representa una afrenta al derecho de todos los ciudadanos a transitar libremente por las calles y aceras de la ciudad.
Los propietarios fueron advertidos por personal de la Municipalidad Provincial de Trujillo sobre las fuertes multas que enfrentarán si persisten en estas prácticas que vulneran las normativas municipales.
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