Escribe Sandy Carrasco Crespo
Tiempo libre, dinero extra y, sobre todo, amor por las mascotas. Estas fueron las cuestiones claves para que Hernán Leigh Reyes, dueño de tres canes, emprenda el trabajo perfecto: paseador y entrenador de perros. Comenzó este oficio desde adolescente y ha logrado mantenerlo hasta ahora, que es un joven de 18 años.
La idea surgió en el 2020, cuando reparó que la gente necesitaba pasear a sus perros, pero no tenían el tiempo para hacerlo. Un año después, en julio de 2021, puso en marcha el servicio canino en su natal Sullana, Piura.
Como era de esperarse, apareció también la competencia, quien ofrecía los mismos servicios, pero el precio variaba de acuerdo al tamaño del animal, razón por la que dejó de operar al poco tiempo.
A Hernán no le incomodaba que hayan abierto un emprendimiento similar al suyo en Sullana, por dos motivos. El primero, porque antes de trabajar en el mundo de los perros había un señor que ya lo hacía tiempo; pero solo paseaba a las mascotas de sus vecinos, sin expandirse mediante las redes sociales.
El segundo porque considera que “todos tienen derecho a emprender, siempre y cuando sea de manera correcta”. Sin embargo, el negocio que surgió después de la suya había copiado los colores de Patitas Walker, su empresa.
Paseador y ayuda al prójimo.
A inicios, Hernán trabajaba solo. Paseaba a diez perros por semana. Una hora con 30 minutos cada uno. En promedio, quince horas semanales. A veces, hasta más, porque algunos clientes solicitaban horas extras. Ahora, que ingresó a la universidad, solo pasea de dos a cinco canes, dependiendo de qué tan hiperactivos sean.
La idea surgió en el 2020, cuando reparó que la gente necesitaba pasear a sus perros, pero no tenían el tiempo para hacerlo. Un año después, en julio de 2021, puso en marcha el servicio canino en su natal Sullana, Piura.
“Hay perros que tienen bastante energía, lo que significa que los paseos tienen que ser más movidos, también hay mascotas tranquilas, con ellas no es necesario correr”. Hernán dice disfrutar de su trabajo y amar el mundo perruno porque cuando anda sin ánimos, los perros lo motivan.
No solo consigue trabajo para él; sino, también, brinda oportunidades laborales para otros jóvenes. Cuando hay una cantidad elevada de clientes que requieren el servicio de Patitas Walker, acude a sus colaboradores, con quienes se distribuye el trabajo, que actualmente no solo ofrece en Sullana; sino, también, en la ciudad de Piura, gracias al alcance que han logrado conseguir mediante sus redes. Su servicio cuenta con tres paquetes; básico, premium y mensual. El más requerido es el básico que cuesta 60 soles por semana.
El susto más grande que se ha llevado Hernán lo experimentó con un rottweiler. Este perro quiso atacar a su cliente canino, un American bully, a quien considera tranquilo y educado, a diferencia del otro can, que le mordió la muñeca al tratar de proteger a la mascota que paseaba. Por suerte, el dueño del rottweiler lo pudo coger a tiempo, si no otra hubiese sido la historia. “Si el dueño no reaccionaba rápido, mi muñeca no la contaba”, evoca.
La angustia desaparece cuando recuerda a una de las caninas. “Conocí a una perrita pastor alemán. Al principio estuve con miedo, pero con el paso del tiempo establecí una muy buena relación con ella. Fue una de las mejores que he paseado”.
“La condición esencial de la felicidad del ser humano es el trabajo”, dijo el novelista ruso que lleva el nombre de un animal: León Tolstoi. Hernán reconoce ser feliz con su labor porque le permite conocer a mucha gente y, sobre todo, porque son dueños de perros, animales a los que ama, y de quienes confirma que son el mejor amigo del hombre.
El hombre Hernán es de origen germánico y significa, algo así, como “viajero gentil” o “viajero espiritual”. Eso es lo que hace este sullanero con su vida y con los animales que quiere: viajar por calles y parques. Viajar, pero no con la consigna del destino, sino con el disfrute del trayecto. El viaje es el camino.
La única empresa que ofrece, en Sullana, actualmente este servicio es la de Hernán, quien ha sabido mantener estable su servicio, y contentos a sus clientes. Y si de aprovechar oportunidades se trata, Hernán no desperdicia ninguna, tanto así que, el feriado 1 de mayo trabajará. Y lo hará con la pasión de quien disfruta de su labor.