Paolo Guerrero finalmente vestirá la camiseta del Club César Vallejo de Trujillo en la presente temporada 2024, según un anuncio oficial realizado por el equipo trujillano la noche del miércoles.
El comunicado pone fin a una serie de controversias y debates públicos sobre el futuro del jugador en el club. El acuerdo, fruto de conversaciones entre Guerrero y el presidente de César Vallejo, Richard Acuña, llega en medio de una controversia en el balompié nacional.
César Vallejo confirmó que Guerrero se incorporará al primer equipo profesional de inmediato, trasladándose así a Trujillo este jueves 22 para unirse a los entrenamientos.
Su arribo a la capital de La Libertad se da tras ser blanco de mensajes extorsivos que previamente sembraron dudas sobre la continuación de su contrato con el club. El equipo también aprovechó para aclarar que cualquiera que fuera la distorsión o malinterpretación de las declaraciones anteriores se ha disipado por completo con este nuevo anuncio.
Además, dieron a conocer su compromiso de tomar todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de Guerrero y de todos los miembros del equipo. El anuncio de la llegada de Guerrero a César Vallejo ocurre tras una serie de eventos y polémicas protagonizadas por el futbolista en las últimas semanas.
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Tras la firma de su contrato con el club, el 2 de febrero, se presentó una ola de amenazas hacia su familia. Con el nuevo acuerdo, el máximo goleador de la Selección peruana se trasladará a Trujillo para comenzar a entrenar con el equipo.
Sin embargo, la situación ha generado divisiones y un debate público en Perú. Mientras algunos apoyan la decisión de Guerrero de privilegiar su seguridad y la de su familia, otros sostienen que estas amenazas no constituyen una razón válida para incumplir un contrato laboral.
A pesar de todo, con el comunicado del club se confirma que Guerrero, quien celebró 40 años el pasado 1 de enero, cumplirá con sus compromisos contractuales y estará defendiendo los colores del César Vallejo en 2024. Una decisión que pone fin al conflicto y que, se espera, permita concentrar los esfuerzos en la cancha y en el juego.
