En un fallo que marca un precedente, la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, presidida por Víctor Prado Saldarriaga, ha emitido una sentencia de 22 años y cinco meses de prisión efectiva para Michael Urtecho, convirtiéndolo en el primer congresista en recibir una condena por recortar salarios a su personal, en un caso que ha sido conocido como el de los ‘mocha sueldo’. El dictamen se basa en la comprobación de los delitos de concusión, apropiación ilícita, lavado de activos y peculado.
Así operaba Michael Urtecho
El escándalo estalló en 2013, cuando se revelaron reportajes que detallaban cómo el entonces congresista de la bancada de Solidaridad Nacional, actualmente Renovación Popular, recortó ilegalmente el salario de sus colaboradores Gladis Flores Galves, Estela Bocanegra Alayo, Karla Paredes Vera y Evelyn Goicochea Miranda durante los años 2006, 2007, 2009 y 2010. El monto beneficiado superó los 430 mil soles.
La sentencia también incluye a Claudia Gonzáles, actual esposa de Urtecho, quien fue señalada como cómplice y condenada a 28 años de prisión. Además, ambos deberán pagar una reparación civil de S/ 630,666.06 a favor del Estado.
El fallo establece un precedente en la justicia peruana, marcando la primera vez que un exlegislador es condenado por aprovecharse de los salarios de sus empleados. En el juicio, Urtecho reconoció sus errores y expresó su arrepentimiento, sin embargo, su confesión no fue suficiente para evitar la sentencia.
El caso también reveló otros escándalos en la trayectoria de Urtecho, como el uso de documentación falsa para sustentar gastos, contratación de trabajadores fantasmas y la imputación de contratos falsos con empresas inexistentes para justificar gastos indebidos.
“Ya le he pedido perdón a Dios. Se cometió un error en 2006, 2007, 2009 y 2010, por pedir apoyo a los trabajadores a través de sus tarjetas de débito. Mañana me podrán decir lo que sea, pero hoy me estoy quitando un peso de encima”, expresó en una entrevista el excongresista. Sin embargo, su arrepentimiento no fue suficiente.
Los ‘mocha sueldos’ del Congreso
Casos como el de Urtecho, el primer ‘mochasueldo’, también se observa en el actual Parlamento.
El escándalo de los ‘mocha sueldos’ se ha extendido por los pasillos del actual Parlamento, dejando al descubierto prácticas cuestionables de algunos congresistas en relación con los salarios de su personal.
En los últimos meses, diversas investigaciones periodísticas han puesto al descubierto nombres de congresistas que presuntamente han recortado los sueldos de sus colaboradores. Magaly Ruíz, Rosío Torres y María Acuña de Alianza para el Progreso, Jorge Flores Ancachi, José Arriola y Merly Portero de Acción Popular, Heidy Juárez de Podemos Perú, y Katy Ugarte y María Cordero Jon Tay de Unidad y Diálogo, son algunos de los nombres mencionados en estas investigaciones.
La Comisión de Ética del Congreso ha tomado medidas en relación con estos casos, pero las decisiones han causado controversia. Algunos de los congresistas señalados, como Magaly Ruíz, Rosío Torres y Heidy Juárez, han evitado sanciones severas, recibiendo en cambio amonestaciones con descuentos en sus salarios. Esto ha generado cuestionamientos sobre la efectividad de los mecanismos de control y sanción dentro del Congreso.
Mientras en el ámbito legislativo la impunidad parece persistir, la Fiscalía de la Nación ha tomado cartas en el asunto y ha iniciado investigaciones por el presunto delito de concusión en contra de los congresistas involucrados en estas denuncias. Esto sugiere que, a pesar de los obstáculos internos, la justicia sigue su curso en busca de responsabilidad.