Mientras reclama justicia la familia de la niña que murió tras contraer dengue y presuntamente no recibir una oportuna atención médica, la Superintendencia Nacional de Salud (SuSalud) inició un proceso de investigación para determinar la responsabilidad del personal sanitario en el cuidado de la menor.
El defensor del Pueblo en La Libertad, José Agüero Lovatón, en diálogo con BuenaPepa, indicó que SuSalud determinará si se cumplieron los protocolos en el establecimiento de salud Wichanzao, distrito de La Esperanza, donde la menor fue trasladado el domingo 23, tras presentar un cuadro grave de dengue.
“Ya nos hemos comunicado con SuSalud para que, como órgano fiscalizador, verifique si se han cumplido los protocolos de atención. Como ellos son especialistas médicos, tienen que verificar cómo son los procesos y determinar si hay alguna negligencia que haya generado que se agrave el estado de salud de la menor”.
Pese a que la víctima fue diagnosticada con dengue, Agüero Lovatón precisó que falta una prueba más de confirmación para conocer si la causa del deceso es esta enfermedad.
“Tuvimos una reunión con el Comité de Salud del Gobierno Regional y nos indican que todavía no está asegurado de que sea dengue. Falta una prueba más. Si se comprueba la negligencia, SuSalud se encarga de sancionar administrativamente y deriva el caso a la Fiscalía para el proceso penal”, expresó el defensor del Pueblo.
Cambios en centro de salud
César Acuña Peralta, gobernador regional de La Libertad, visitó a los deudos de la menor que perdió la vida en el centro de salud de Wichanzao. Tras darles el pésame y reunirse con el padre, anunció cambios en este establecimiento que administra el Gobierno Regional.
“El director del establecimiento tiene que ser cambiado de inmediato. Se tiene que hacer una inducción completa a todos los trabajadores. Ha sido una negligencia. Indigna que un médico que tiene que cuidar la vida no brindó la atención. Cómo es posible que la niña que está muriendo no le den la atención”, declaró.
El gobernador respaldó la gestión del gerente de Salud, Aníbal Morillo Arqueros, y anunció la construcción de una nueva infraestructura para este establecimiento.
Exige justicia
“Mi familia está destrozada”, dice Malaquías Chihuala, padre de la menor. Recordó que dos veces acudió al centro de salud en busca de atención profesional para tratar a su hija, y las dos veces fue enviada a casa.
“Mi hija fue tratada el domingo 23 en el establecimiento de salud. Le sacan pruebas de dengue, da positivo. Le dan paracetamol y la vuelven a mandar a casa. El lunes voy, le ponen vía, la vuelven a mandar a casa. El martes amanece botando sangre, bastante sangre; la llevo de emergencia para que la vean. La llevo a las 6 de la mañana y a eso de las 8:15 de la mañana, mi hija muere. Muere botando sangre por la boca y nariz. Recién el doctor corre a colocarle la máscara de oxígeno. Es una cosa absurda, ya no tiene nombre”.
Contó que las enfermeras intentaron reanimarla y solicitaron una ambulancia para ser trasladada al Hospital Regional. “En el acta figura que ha muerto en el Regional, pero eso no es así. Cuando vi que mi hija se desmayaba, encaré al doctor y le dije ‘Mi hija se muere’. ‘Señor, estamos haciendo nuestro trabajo’”, sostuvo.
Se aguarda el informe de SuSalud para determinar acciones administrativas y penales contra los médicos responsables.