Martín es cineasta, fotógrafo, sicólogo y, sobre todo, un amante del arte. Alguna vez pensó en ser músico, pero la pasión por el cine lo ha llevado a realizar distintas producciones y ganar la beca artística Denk Zeiten Leipzig en Alemania. La película de Rebaza, que se estrenará pronto en Trujillo, participó en seis festivales, entre ellos, el de Biarritz, en Francia, uno de los más importantes para el cine latinoamericano.
Es el primer estreno en la ciudad que te vio crecer, ¿qué sentimientos te genera volver a Trujillo?
¡Estoy muy emocionado! Normalmente, en las películas, se busca estrenar primero en Lima, pero nosotros quisimos salir de esa estructura. A parte, la película trata sobre Trujillo. Es el personaje de la película. Es, además, la ciudad donde he vivido. Estoy contento porque también, fue una excusa para regresar a Trujillo (ríe).
Sobre la película
Entre estos árboles que he inventando (EEAQHI’) narra el drama de una fotógrafa (personificada por la periodista Maritza Sáenz) que recorre un Trujillo en blanco y negro. Junto a su cámara analógica retrata árboles, calles y cuartos de hoteles después de encuentros sexuales. Mientras enfrenta a la soledad y una deuda heredada; conoce a una mujer, con quien consigue una conexión especial.
En el largometraje, se juega mucho con la idea de nostalgia, lo corporal, la ausencia y los espacios, con una mirada bastante íntima y personal, ¿cuánto ha podido influir su perspectiva sicológica en el desarrollo de la película?
La perspectiva sicológica es fundamental, incluso como cineasta y fotógrafo. En sicología desarrollamos el tercer ojo, que es como la intuición que uno tiene sobre las emociones y las relaciones interpersonales. Fuera de la parte técnica, estética o creativa, siempre voy por los vínculos y la esencia de la persona.
La mayoría de los actores no han tenido experiencia previa actuando y hasta, incluso, lo han hecho sin guion, ¿la realización de la película se dio de manera orgánica?
En la película hemos usado escaletas en vez de guiones. Hay muchas formas de hacer cine y nosotros decidimos trabajar con no actores. Esa fue la idea inicial. Todo se dio bastante orgánico y así busqué que las personas se parezcan bastante a los personajes que escribí. Queríamos desarrollar los personajes desde las emociones, de esa forma, yo no les exijo actuar, sino, los invito a hacer.
¿Fue complicado trabajar de esa forma?
Ya venía con experiencia siendo coordinador de casting en la película Casos Complejos, la película de Omar Forero; también en la película de Salomón Pérez, En medio del Laberinto, por eso ya sabía las características emocionales de los personajes, incluso, antes que su apariencia física. No fue difícil hacerlo, felizmente encontré a las personas indicadas.
Ese espíritu de la fotografía, ese instinto de observar…
La fotografía está presente en todo momento y siempre me ha gustado verla desde lo abstracto, desde un lado íntimo. El personaje principal de la película, fue construido de esa forma, entrando en conflicto y rompiendo los parámetros tradicionales de la fotografía.
¿Cineasta o fotógrafo?
¡Uy! ¡Qué difícil! Creo que soy más ecléctico, no me gustan las etiquetas. Son complementarias (para mí), pero también dependen del momento. Ahora, por ejemplo, me considero más cineasta que fotógrafo.
Buscaste retratar espacios emblemáticos de Trujillo desde una perspectiva real y sincera, ¿cómo ves a la ciudad, actualmente?
Regreso después de dos años y Trujillo está con mascarilla (ríe). La verdad, no ha cambiado mucho. La idea era retratar a un Trujillo, no como un postal de Promperú. Estaba harto de que relacionen a Trujillo como la capital de la eterna primavera, cuando en verdad, no lo es. Lo fue, tal vez, pero yo no la viví así. Capital de la eterna balacera, tal vez (ríe). Quería una perspectiva más honesta.
¿Trujillo tiene potencial para ser una ciudad cinematográfica?
¡Claro que sí! Tiene muchos matices, recursos y gran potencial. No solo en Lima se hace cine y pienso seguir haciendo películas en Trujillo.
¿Existe apoyo al cine trujillano?
No solo con el cine, en general, con las artes, siempre nos cierran las puertas. Hemos obtenido financiamiento, sí, pero del Ministerio de Cultura a nivel nacional y no sé qué tan ligado esté con la Dirección Desconcentrada (en La Libertad). Tal vez por eso tengo cierto amor-odio con Trujillo. Siento que existe un poder hegemónico de cinco familias privilegiadas de Trujillo, quiénes movilizan la cultura de Trujillo, se apoderan de ella y no dejan que avance.
¿Quién es Martín Rebaza?
Martín Rebaza Ponce de León es cineasta, fotógrafo y egresado de la escuela de psicología en Trujillo. Ha realizado cortometrajes entre documental, ficción y experimental. Ha sido creador de La Oveja Negra, página que sirvió para difundir conciertos de música independiente a través de videos y fotografías. Trabajó en diferentes producciones realizadas en Perú y Alemania y estuvo a cargo de la producción y dirección de fotografía de la película peruana En medio del laberinto. Ha dictado un taller de realización audiovisual a mujeres de la comunidad nativa Awuajún en el departamento de San Martín, Perú. También participó como programador de la quinta y sexta edición del Festival de Cine de Trujillo. Es, además, ganador de los estímulos económicos peruanos para la cultura en 2020 y 2021 con su ópera prima Entre estos árboles que he inventado, y ganador de la beca artística Denk Zeiten Leipzig, Alemania.
Ganador de una beca artística en Alemania, ¿planeas trabajar con cineastas extranjeros?
Sí, de hecho. Ahora vivo como migrante allá y trabajo como fotógrafo y realizador. La cotidianidad me ha impulsado a escribir un proyecto para hacer una película en Alemania. Yo no cierro posibilidades, en cuánto me sienta a gusto, lo haré.
¿Qué viene para ti?
Seguimos impulsando este quehacer cinematográfico. Estoy escribiendo historias para Trujillo y también para Pucallpa, ciudad donde también viví. Este año, me voy a quedar unos meses más, para trabajar en la nueva película de Salomón Pérez.
¿Dónde podemos ver la película?
El estreno de EEAQHI en Trujillo, será el próximo 25 de marzo y la avant premier se realizará en el Teatro Municipal de Trujillo.