Extraño y suspicaz. Mientras se desarrollaba la audiencia del Jurado Nacional de Elecciones sobre la suspensión de Arturo Fernández Bazán, como alcalde de Trujillo, personal edil retiraba más de una docena de costales con documentación, hasta el cierre de esta edición, no especificada por los responsables de dicha acción.
Fue por la puerta lateral del palacio municipal, ubicada en el jirón Diego de Almagro. La acción fue catalogada como irregular por el regidor Jorge Vásquez. Cuestionó, además, que los documentos sean depositados en el almacén del complejo deportivo Chan Chan.
“Es sospechoso que el día de hoy (suspensión de Arturo Fernández) se lleven documentos a un sitio como (el complejo deportivo) Chan Chan, en donde se han robado todo, la gente del mismo alcalde. Lo tengo grabado”, precisó.
La norma dicta que todo documento, debe ser almacenado en el local del archivo documentario, ubicado en la avenida España.
“Los trabajadores se adelantaron un poco”
Por su parte, el gerente de administración, Omar Burga, argumentó que dicha documentación es de gestiones anteriores y que fueron trasladado a un lugar administrado por la MPT. Sin embargo, no dio la orden de manera directa y no supervisó el trasladado porque su personal se adelantó.
Asegura que era una cuestión de comodidad: “Son documentos del año 2009, 2010 y 2011. Trabajo con ocho bellas damas y estaban en contacto con los ácaros”, detalló.
BuenaPepa le consultó sobre el reglamento en relación con el acervo documentario (conjunto de documentos conservados por su valor sustantivo, administrativo, histórico o cultural) y respondió: “están en custodia y dentro de las instalaciones de la (comuna) provincial”.
Contraloría tomó acciones
El traslado de dicha documentación a un lugar ajeno al archivo documentario motivó una diligencia por parte de la Contraloría General de La República, en la Gerencia de Administración de la MPT.
La diligencia duró, aproximadamente, tres horas. A petición de los regidores, también se sumó un representante de la Fiscalía Anticorrupción; sin embargo, el Órgano de Control Interno de la comuna estuvo ausente.
La comuna trujillana deberá responder, a la brevedad posible, por el traslado y el contenido específico de los documentos; de no hacerlo, la Gerencia de Administración podría percibir un proceso administrativo sancionador.