Decenas de héroes, personajes ilustres y famosos que vivieron o dejaron huella en Piura están abandonados en el lugar terrenal donde reposan sus cuerpos.
El olvido del que son víctimas se agiganta, en estos días —primeros de noviembre—, en los que se celebra el Día de Todos los Santos y el Día de los Muertos, acontecimientos, también, conocidos, de manera popular, como velaciones.
En el cementerio San Teodoro, el más antiguo de Piura, reposan los restos de decenas de personas, que protagonizaron hechos y acontecimientos importantes en la historia del norte del Perú.
Descansan en espacios decaídos, lápidas despintadas, paredes agrietadas, losas destruidas, pabellones bajo escombros como si hubieran sido escenario de una guerra o terremoto.
El olvido del que son víctimas se agiganta, en estos días —primeros de noviembre—, en los que se celebra El Día de Todos los Santos y el Día de Todos los Muertos.
Además, rejas oxidadas, nichos destruidos, muros devorados por la corrosión; un lugar abandonado e impregnado por la indiferencia de las autoridades competentes.
Día de los muertos y el olvido
Entre los sepulcros desdeñados, figuran los que pertenecen a Felipe Cossío del Pomar, pintor y escritor influyente de la corriente del indigenismo, quien es considerado un gran impulsor del arte.
También, Miguel Gerónimo Seminario y Jaime, compositor del himno piurano y héroe de la Independencia.
Además, se encuentran los cadáveres de referentes de la política peruana, como Francisco José Eguiguren Escudero, quien presidió la Corte Suprema y el Poder Judicial entre 1913 y 1914.
Luis Antonio Eguiguren, expresidente del Congreso de la República del Perú, quien fue regidor y alcalde de Lima, fundador y líder del Partido Socialdemócrata.
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Tiempos aquellos
Según Enrique Sandoval Trelles (60), quien ofrece el servicio de limpieza, pintura y colocación de flores en las tumbas, el cementerio San Teodoro es el lugar de mayor expresión de las tradiciones y costumbres piuranas en el ámbito de los entierros y velorios.
“Empecé a trabajar desde los 10 años en el cementerio San Teodoro y he presenciado el entierro de famosos piuranos, como Susana León Torres, una reina de belleza que falleció en un trágico accidente en 1961”, evocó.
Consideró que el camposanto perdió su espíritu icónico de Piura cuando se retiró el administrador Elespuru Vilela en los años 80. “Desde aquel momento, San Teodoro no ha tenido una buena conservación”, declaró.
Por otro lado, el también, trabajador del panteón, Juan Cisneros Arambulu (53), refiere que la Municipalidad Provincial de Piura brilla por su ausencia e indiferencia, puesto que no destina presupuesto para mantener y reparar la infraestructura y espacios del cementerio.
“San Teodoro, en comparación a los demás cementerios, ha sido olvidado y abandonado por parte de las instituciones que deberían de destinar un presupuesto para su reconstrucción. Por eso, cada año baja la concurrencia de las familias en el día de las velaciones y, a la vez, disminuye nuestro trabajo”, lamentó.
El cementerio San Teodoro lleva 185 años de historia de Piura. El 20 de junio de 2000 fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación, cuyo espacio es un tesoro de historia, identidad cultural y costumbres funerarias.
Escribe Sebastián Salazar Valdiviezo
Fotos Renzo Vicentes Jiménez