InicioFruta de exportaciónCovid–19: secuelas no son mortíferas, pero sí de temer

Covid–19: secuelas no son mortíferas, pero sí de temer

¿Sientes dolor de pecho, de espalda; cansancio, garraspera o dificultad para respirar? Estos síntomas pueden ser consecuencias del coronavirus. El grado de gravedad depende del nivel de afectación que han sufrido los infectados. Los que han estado en UCI son los que padecen efectos más letales.

La covid–19 genera consecuencias irreparables en la salud de los pacientes, en especial de aquellos que han presentado reinfecciones en innumerables ocasiones. Así lo reafirma la dra. Ana María Burga Vega, responsable de la oficina de epidemiología e información de la Gerencia Regional de Salud La Libertad.

“Cada infección por covid-19 siempre deja secuelas de diferentes magnitudes dependiendo de cuánto impacto ha tenido la enfermedad. En efecto, los pacientes que han entrado a UCI presentan consecuencias mucho más serias”, comentó la especialista.

Además, Burga asevera que la covid–19 generó impactos negativos en la salud física y mental. “He visto pacientes debilitados que no pueden caminar y necesita rehabilitación; pacientes que tiene deterioro de su función pulmonar porque la covid destruye las células del pulmón y genera cicatrices dándose lugar a una fibrosis pulmonar. La persona no tiene la capacidad de respirar como lo tenía antes”, detalla la doctora.

“La covid deja secuelas en los vasos sanguíneos produciendo una tendencia a la trombosis pulmonar y cerebral. También se desencadena infartos y derrames inesperados; así como trastornos neurológicos y neuropsiquiátricos. Hay pacientes que han tenido intentos de suicidios e ideas de que les hace daño o que serán víctimas de agresión. Podría decirse que se intensifica las crisis de ansiedad y pánico”, agregó Burga.

A esto se suma la opinión del infectólogo del Hospital de Ate Vitarte, Félix Chávez Mercado, quien precisa la duración prolongada de los síntomas: “Se ha visto que cuando uno vuelve a reinfectarse de covid-19, estos síntomas tienden a extender su duración e intensidad. Por ejemplo, si antes, duró solo 15 días; ahora, podría ser de 3 a 5 meses dependiendo cuántas reinfecciones sean. Los síntomas como, el dolor de pecho, de espalda, cansancio, garraspera y dificultad para respirar suelen ser más persistentes”.

Asimismo, el especialista recuerda que, durante los tres primeros meses de este año, en el nosocomio de Ate Vitarte, se atendió un mayor número de reinfectados en comparación con rebrotes anteriores. “Por día, había unos 6 a 7 reinfectados acudiendo al hospital. Gracias a las vacunas, ninguno de los pacientes tenía síntomas de peligro de muerte como lo sucedió en la primera ola”, aseveró.

Caso similar ocurrió en el Hospital Regional Docente de Trujillo, tal como lo afirma el director ejecutivo, César Augusto Fernández Sánchez. “La casuística, en el peor momento de la tercera ola, hemos tenido 49 pacientes graves hospitalizados. Definitivamente, en la tercera ola se presentó un mayor número de infectados”, afirmó el Dr. Fernández.

Vacunas y reinfecciones
“Si bien es cierto, las vacunas evitan la muerte; mas no, la posibilidad de reinfectarse”, así lo afirma la doctora Ana Burga. Es por ello que recomienda a los compatriotas recibir las tres dosis de vacunación; a excepción del personal de salud, adultos mayores y personas inmunodeprimidas, ya que, según lo que considera, ellos deben recibir la cuarta dosis.

“Hasta el momento, seguimos presentando más casos de infección por covid-19; entonces, hay peligro de reinfectarse y con mayor gravedad. El punto es que, si uno está vacunado, las defensas comienzan a incrementar. Hasta el tercer mes se percibe una buena cantidad de anticuerpos; pero pasa ese tiempo y los anticuerpos van declinando. Es ahí donde se da lugar a las reinfecciones”, explicó la doctora Burga.

Al respecto el infectólogo Félix Chávez Mercado enfatiza la importancia de las vacunas en el estado clínico de los pacientes. “La función de la vacuna es evitar la muerte y casos severos. Quienes han recibido 3 dosis no han llegado a UCI. Con 2 dosis, uno o dos sí se enfermaron con gravedad. Mientras quienes contaban con solo 1 dosis, todos estaban registrados en UCI”, agregó.

Por otro lado, César Fernández destaca que combatir las secuelas que ha traído el covid-19 también debe ser motivo de interés para el Gobierno. “Deben estar atentos los avances de la vacunación. Además, se debe incrementar los presupuestos para contratar a más personal de salud que son tan necesarios en esta emergencia sanitaria”, opinó.

Una mirada a la base
Si bien los últimos reportes del Ministerio de Salud datan una disminución en 6% en la taza de letalidad; aún no se ha detenido las cifras de reinfectados. Ante ello, Lima sigue siendo la región que ha presentado el mayor número de infectados hasta el momento. Es por ello que el infectólogo, Carlos Mariños Anticona considera inédito que, en Lima, se aplique una medida que deja más vulnerable a su población.

“La región limeña es potencia en contagio. Lo bueno es que el 58% de su población está vacunada. Considero que, en sí, dicha condicionante es una referencia para inducir que se cuiden, que se vacunen, y que no se reúnan en masas”, enfatizó.

Vivián Fernández Sevillano
Vivián Fernández Sevillano
Nació en Trujillo, una ciudad predispuesta para la cosecha de mangos. Por ende, era la fruta que más abundaba en su casa durante el verano. Además de su dulzura y buena pepa, este tropical comestible le enseñó lo que es la madurez de los vegetales y a no dejarse llevar por las apariencias. Ahora, esas enseñanzas le sirven en su actividad periodística, la misma que orienta hacia el bienestar de las familias. El secreto, dice, está en enamorarse del proceso que implica la búsqueda de la verdad, y más en los días de lluvia.