Escribe Ryan Oliva Carranza
Producto del convulsionado contexto que se vive en el Perú, distintas vías de transporte han sido afectadas. Ello no ha sido ajeno a la realidad liberteña. Las enajenadas turbas que han invadido la carretera Panamericana, a la altura de Chao y Virú, han causado alboroto y el miedo de los conductores y pasajeros, algunos de los cuales llevan varados, en medio de la vía, desde el día domingo 11. La situación en Valle Chicama, felizmente, es distinta.
Sin embargo, esta es una situación que parece ser ajena para el desarrollo del tránsito de vehículos interprovinciales entre el valle Chicama y la ciudad de Trujillo, capital del departamento de La Libertad. Aunque la preocupación es constante para algunos de los asiduos pasajeros de esta ruta.
Estudiantes preocupados
El desarrollo de las actividades para los universitarios que se trasladan desde el valle no ha cesado. Estudiantes de la Universidad Privada Antenor Orrego (UPAO) y la César Vallejo, aún no se han pronunciado respecto a la situación en Chao y Virú, por lo que temen que, ante un inminente bloqueo de la carretera, su asistencia a clases se imposible. “Vamos todos los días, pero con una preocupación constante, no se sabe si va a pasar algo”, comenta Ángel David Barrenechea, estudiante de ingeniería de la Universidad César Vallejo.
Sin embargo, esta es una situación que parece ser ajena para el desarrollo del tránsito de vehículos
Transportistas guardan la calma
Los conductores de las minivans se mantienen tranquilos. Aseguran que los precios no subirán y que los recorridos seguirán cumpliéndose con normalidad. “La gente puede estar tranquila, seguiremos saliendo desde las 5 de la mañana hasta las 9 de la noche. La empresa no ha dicho nada, tampoco”, comenta Brayan Gutiérrez, chofer de la empresa transportista TCG, que cubre la ruta Casa Grande-Trujillo.
Valle Chicama libre
Con el transcurso de los días y el conflicto asentado en el norte de Trujillo, las vías que continúan bloqueadas pertenecen a los kilómetros 491 al 500, en el tramo que conecta Santa-Chao y 524 al 528, que comprende el tramo de Chao a Virú. De igual forma, la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) confirmó que son 57 los puntos interrumpidos en diversas carreteras a lo largo del territorio peruano.
