“Mi tío vendió su terreno porque le pedían un cupo de 10 mil soles. Todos los días lo amanazaban con matarlo si no pagaba. Ahora solo le queda su trabajo”, cuenta una vendedora de pollo del mercado San Isidro, en Trujillo.
Ella también teme convertirse en una víctima de extorsión, como lo son muchos emprededores y comerciantes de la zona.
“Cuando viene gente extraña, espero con resignación que me pidan cupos. Cada día es más común y da miedo y cólera porque se trabaja para otros”, dice mientras desolla un pollo perla a petición de una clienta que la escucha con atención y con la piel escarapelada.
Extorsión de cada día
En solo 24 horas, delincuentes dejaron dinamita en diversos negocios y viviendas de la provincia de Trujillo: en la ferreteria El maestrito y en una vivienda del distrito El Porvenir; en el colegio Salazar Bondy, y en otras dos viviendas. Los últimos casos no han sido denunciados.
Los atentados en el distrito zapatero y el colegio Salazar Bondy se le atribuyen a la organización criminal Los pulpos; sin embargo, ninguno de los autores materiales han sido identificados por la Policía, que solo promete capturarlos.
Sin embargo, el hampa promete derramar sangre: “La tranquilidad de tus alumnos vale 50 000 mil soles”, se lee en la carta que dejaron en el colegio Salazar Bondy.
“Somos Los pulpos. Te damos 24 horas para que pagues 30 mil soles, si no matamos a tu familia”, se lee en la carte que dejaron en un negocio de El Porvenir, cerca a la avenida Nicolás Yerovi.
Una vecina del cerro El Presidio, contó a Buena Pepa una escena de película que grafica que hasta la autoridad le tema al hampa.
“Explotaron una dinamita en el portón enrrollable de una farmacia. Todos los vecinos acudimos a ver qué pasó, porque el estruendo fue muy fuerte”.
“También había llegado Serenazgo; sin embargo, dos delincuentes en una moticicleta aparecieron y dispararon contra la fachada. Los serenos, asustados, no hicieron nada. ¿Con qué pues, si no tienen armas?
Una versión que contradice la realidad
El general José Zavala Chumbiauca, ha informado que “en lo que va del estado de emergencia 32 extorsionadores han sido capturados”.
La intervención más notoria ha sido la vinculada a la madre de Paolo Guerrero.
Al respecto, el especialista en seguridad ciudadana Roger Torres, quién fue jefe de la Policía en La Libertad en 2012, refiere que para que el estado de emergencia sea efectivo “urge atacar la criminalidad organizada que es la que tiene en zozobra a la población”.
“Los militares y los policías deben estar en los distritos picantes, no en los óvalos o centros comerciales”, setencia un taxista que en dos ocasiones ha pagado cupos para que le devuelvan su herramienta de trabajo.
“Muchos taxistas pagan cupos para que no les roben sus unidades”, dice mientras señala el sticker de un lobo aullando en el parabrisas.