La depresión y la ansiedad se han convertido en las principales preocupaciones de salud mental en el distrito de La Esperanza, en Trujillo. Durante los últimos años, se ha registrado un inquietante incremento en el número de pacientes que sufren estas patologías.
El aumento de estos casos en la comunidad se debe, principalmente, a factores como el desempleo, la finalización de relaciones amorosas y la pérdida de familiares, según datos del Centro de Salud Mental Comunitario de La Esperanza.
La institución reveló que no existe distinción de edad entre los pacientes, por ello es común que ofrezcan atenciones tanto a jóvenes como adultos.
En casos de depresión, las mujeres son las más afectadas, con un rango de edad de 20 y 65 años. Este problema es más prevalente en mayores de 40 años, a menudo debido a la presión de manejar el hogar y la familia, conflictos de pareja o situaciones de violencia doméstica.
Por otro lado, la ansiedad afecta, principalmente, a adolescentes en La Esperanza, quienes experimentan estrés relacionado con el control del uso de dispositivos móviles, la presión académica, y los exámenes de admisión a la universidad.
Centro de salud mental referencial
Este centro comunitario, ubicado en la avenida Prolongación Libertad en el asentamiento humano Las Palmeras, se encarga de casos moderados, graves y severos, mientras que los problemas leves son manejados por las postas de salud de primer nivel, que funcionan en el distrito.
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“Nosotros somos un centro referencial, recibimos casos que necesitan un tratamiento más especializado”, explicó Mayra Sánchez, directora del Centro de Salud Mental Comunitario de La Esperanza.
Debido a la alta demanda de atención, a diario la entidad no cuenta citas disponibles y los servicios están copados cada mes.
La ansiedad afecta, principalmente, a adolescentes en La Esperanza, quienes experimentan estrés relacionado con el control del uso de dispositivos móviles, la presión académica, y los exámenes de admisión a la universidad.
Además, el centro se enfrenta al desafío de atender exclusivamente a residentes de La Esperanza que cuentan con el Seguro Integral de Salud (SIS), lo que limita aún más su capacidad de respuesta.
Ofrecen un enfoque multidisciplinario en sus tratamientos, lo que involucra a siquiatras, sicólogos, médicos de familia, enfermeras y terapeutas.
Sin embargo, uno de los mayores desafíos es que muchos pacientes no buscan ayuda de manea voluntaria.
“El mayor desafío que tenemos es que los usuarios no permiten ser ayudados. Aceptamos a personas que quieren ser ayudadas, no podemos aceptar a quienes son obligados”, advirtió la directora.
Los establecimientos de salud del Ministerio de Salud del Perú (Minsa) atendieron, en el 2023, a un total de 80 271 casos de individuos que presentaban trastornos mentales y del comportamiento derivados del consumo de sustancias psicoactivas.
Además de tratar a los pacientes, el centro colabora con aliados estratégicos como la municipalidad, la Unidad de Gestión Educativa Local (Ugel) y centros educativos para implementar planes preventivos desde cero, es por ello que trabajan en equipo para proponer un plan preventivo y ayudar a reducir la incidencia de estos problemas en la comunidad esperancina.
Cuando una persona necesita de atención en salud mental, debe acudir al establecimiento de salud más cercano. Allí un profesional de sicología o medicina lo atenderá.
Si el caso fuera moderado o grave, te derivará a un Centro de Salud Mental Comunitaria, donde te brindarán una atención ambulatoria y especializada.
En La Libertad funcional 17 Centros de Salud Mental Comunitarios, 8 en la provincia de Trujillo (Trujillo, El Porvenir, La Esperanza, Moche, Víctor Larco y Florencia de Mora) y 9 distribuidos en las provincias de Gran Chimú, Virú, Chepén, Otuzco, Sánchez Carrión y Ascope.
El horario de atención es de lunes a sábado de 7 a. m. a 7 p. m. (Podría variar según la localidad)
Escribe: Lucero Polo Ledezma
