Amnistía Internacional Perú advierte el debilitamiento de los derechos de las mujeres en el Perú.
En vísperas del Día Internacional de la Mujer, la organización señala que a pesar de los avances en la lucha por la igualdad de género, se están registrando retrocesos significativos en las políticas públicas, lo que pone en riesgo los derechos obtenidos durante décadas de ardua lucha.
Según Amnistía Internacional Perú, varias propuestas preocupantes han surgido en el panorama político, incluyendo cambios en el nombre y enfoque del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), así como debilitamiento de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.
Se están registrando retrocesos significativos en las políticas públicas, lo que pone en riesgo los derechos obtenidos durante décadas de ardua lucha.
Estos cambios se dan en un contexto alarmante de violencia machista en el país, lamentó el organismo internacional.
Ataques sexuales a mujeres
Solo en el año 2023, los Centros de Emergencia Mujer (CEM) registraron 11,944 casos de violación sexual, siendo la mayoría de las víctimas niñas, niños y adolescentes.
Además, según cifras oficiales, el año pasado se reportaron 1,354 casos de niñas menores de 15 años que se convirtieron en madres como resultado de violencia sexual, incluyendo a cuatro niñas de tan solo 11 años.
A pesar de estas cifras alarmantes, la educación sexual integral se ha debilitado en el país.
Además, se están promoviendo proyectos que obstaculizan el derecho de las niñas a acceder a un aborto terapéutico, en nombre de la protección de la madre gestante, el niño por nacer o el reconocimiento de derechos al concebido.
Estas iniciativas refuerzan el círculo de violencia machista y limitan aún más las opciones y derechos de las mujeres.
Marina Navarro, directora de Amnistía Internacional Perú, ha expresado su preocupación por el desmantelamiento de las políticas que buscan reconocer y enfrentar la violencia machista de manera estructural.
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Navarro enfatiza que incluso niñas de 11 años violadas sexualmente están siendo negadas en su derecho a acceder a un aborto terapéutico, lo que perpetúa la idea de que las mujeres son propiedad de alguien.
“No podemos permitir esta arremetida antiderechos, que afianza la idea de que las mujeres somos propiedad de alguien”, lamentó Navarro.
El demonio de los feminicidios
En cuanto a los feminicidios, la expresión más grave de la violencia machista, se registró un aumento de 40 casos en comparación con el año anterior.
En 2023, 170 mujeres fueron víctimas de feminicidio en Perú. A pesar de esta situación alarmante, el Congreso aprobó un dictamen para cambiar el nombre del MIMP a Ministerio de la Familia y Poblaciones Vulnerables, lo cual reduce el rol de la mujer a uno reproductivo y debilita la institucionalidad de una entidad que ha trabajado en favor de los derechos de las mujeres.
Alex Falla, activista de Amnistía Internacional en Arequipa, denuncia que bajo argumentos religiosos o morales se está negando el acceso a los derechos de las mujeres y se busca limitar su capacidad para tomar decisiones sobre sus vidas y sus cuerpos.
Falla hace hincapié en que el Estado está debilitando un marco que permitiría vivir en igualdad y libre de violencia.
Violencia contra la mujer: papel de las autoridades
Ante esta preocupante situación, Amnistía Internacional hace un llamado a las autoridades para que eviten cualquier iniciativa que debilite el marco legal en favor de los derechos de las mujeres.
En cambio, insta al Estado a reconocer la violencia machista y sus causas subyacentes, impulsando medidas que garanticen que todas las mujeres puedan ejercer plenamente sus derechos.
Bajo el lema “Maternidades por elección, no por imposición”, se desarrollarán movilizaciones en diferentes regiones del país el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, para seguir luchando por los derechos de todas las mujeres en Perú.
