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Físico de la UNI busca ayudar a la sociedad a través de sus inventos

José Luis es profesor universitario desde 1994 y junto a su equipo en el 2020 crearon una tela que combate microbios, virus y bacterias usando nanotecnología.

“La ciencia al servicio de la sociedad”, es la frase que José Luis la tuvo bien claro desde que decidió estudiar Física en la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), casa de estudios donde ahora es docente.  Desde entonces, el doctor José Luis, se dio cuenta que lo suyo era aplicar la ciencia para ayudar a los demás, propósito que lo logró cuando en el 2020, junto a su equipo multidisciplinario que lidera, crearon una, en plena pandemia, crearon una tela capaz de destruir o inactivar al virus del covid-19, gracias a estudios que venían realizando físicos e ingenieros textiles de esa casa de estudios. Hoy, en los próximos días, 60 médicos, entre enfermeras y obstetras de las áreas de emergencia del Instituto Nacional Materno Perinatal (INMP), que trabajan en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), usarán estas prendas que contienen propiedades antimicrobianas.

Las 2 grandes pasiones del doctor José Luis: investigar y enseñar. (Foto: andina)
José Luis: “Soy un físico experimental, con los pies en la tierra, trato de aplicar la ciencia, es el sueño de todo investigador. La labor científica está al servicio de la resolución de problemas de la sociedad, la industria y el mercado”. (Foto: andina)
José Luis junto a su equipo de trabajo, en el 2020 crearon una tela capaz de destruir o inactivar al virus del covid-19, gracias a estudios que venían realizando físicos e ingenieros textiles de esa casa de estudios. (Foto. andina)
Solís Véliz es profesor investigador de la Facultad de Ciencias de la UNI, director del Centro de Energías Renovables (CER) y jefe del Laboratorio de Investigación de Materiales Funcionales. (Foto: andina)
Iván Orbegoso
Iván Orbegoso
Nació en un lugar donde no se cultivan manzanas, pero si las ganas de superarse. Emigró a la ciudad donde habían otras frutas, pero no eran gratis. Así que tuvo que trabajar y estudiar mucho. Ingresó a la Universidad Nacional de Trujillo donde su refrigerio era jugo de naranja. Allí se enamoró de la fotografía cuando disparó a un canasto lleno de frutas frescas. Llegó a trabajar en el Diario La Industria de Trujillo donde le sacó el jugo a todas las comisiones. El 2020, la mejor pepa le llegó con el Gran Premio Nacional de Periodismo por una pepaza fotográfica sobre las protestas agrarias en Virú, La Libertad.