Los gallinazos sobrevuelan el Mansiche. Hay un hedor que parece definitivo, pero aún hay tiempo. ¿Pero realmente hay tiempo? Mannucci, último en el Clausura y penúltimo en el acumulado, huele a descenso. Es innegable. ¿Quién salva al ‘Tri’?
El popular cuadro trujillano vive su hora más crítica desde su regreso al profesionalismo, allá por 2014 (Liga 2 o Segunda Profesional). Cierto es que en 2015 coqueteó con la zona baja, pero un arreón final con el ‘Pato’ Cabanillas lo salvó holgadamente. Hoy parece que no hay atisbos de esperanza.
Pero sí hay una esperanza. Y no es la directiva, que encabeza Raúl Lozano desde 2015, ni tampoco el tercer técnico elegido para la temporada, Salomón Paredes -valiente para coger el timón de un barco a la deriva-. Es la hinchada. El carlismo.
Si Mannucci puede ser considerado un grande en el norte del país no es porque tenga un estadio -no lo tiene-, un infraestructura deportiva -incipiente- o una vitrina de trofeos nacionales -tampoco la tiene-. Es grande por su hinchada. La fiel. La real. La que no abandona.
Mannucci descendió en 1994 y sus fieles seguidores continuaron alentando en el Mansiche a un equipo cada vez venido a menos, que estuvo a punto de irse a Segunda Distrital. Vibró con sus campañas en Copa Perú de 2009 y 2013, y celebró como nunca el ansiado retorno a Primera.
Solo la hinchada tricolor puede salvar, como viento en un mar de calma, este barco a la deriva llamado Mannucci. Con su aliento remar junto a la directiva, comando técnico y jugadores para ganar siempre en casa y pelear los puntos fuera. Solo el carlismo salvará al ‘Tri’ de retornar a los infiernos.
Un fierro caliente
Hoy, a las 7:30 p. m., debuta Salomón en Mannucci, exfutbolista carlista que vivió en carne propia el descenso del 94 y lloró en aquel vestuario. El ‘Tri’ se mide ante ADT, equipo en zona de Sudamericana.
El equipo trujillano no tiene margen de error. Salir de la zona roja no está tan lejana -a 5 puntos-, pero hay que querer hacerlo. Esta noche se sabrá si ‘Salo’ encuentro una plantilla dispuesta a dar ese primer paso.
