Cientos de transportistas de Lima y Callao acataron un paro para exigir mano dura al Gobierno contra las extorsiones de las que son víctimas; sin embargo, la respuesta que llegó desde el Congreso solo demuestra el desinterés que tienen los padres de la patria por atender este problema social.
José Cueto, parlamentario de la bancada Honor y Democracia, planteó a los conductores y dueños de las empresas de transporte «instalar láminas antibalas» para evitar los ataques armados contra las unidades que a diario recorren las calles de la capital.
¿Y si mejor le pide al Ejecutivo y a sus colegas del Legislativo trabajar en serio por la seguridad ciudadana?