Desde la ventana de un segundo piso, un hombre con el torso desnudo levanta las manos en señal de derrota, mientras desde la calle dos agentes le apuntan con sus armas de reglamento.
Un equipo de Inteligencia y de la División de Secuestros de la Policía Nacional rompe la chapa de la puerta y sube hasta el segundo piso, mientras los dos agentes en la calle siguen apuntando al sospechoso y le ordenan que no se mueva.
Es la madrugada del sábado 13, vísperas del Día de la Madre, y la Policía puso en marcha el Plan Antisecuestros 2023 para rescatar al empresario Paulo Huansi Loayza, de 43 años, dueño de la cevichería Purito Mar, ubicada en la cuadra 2 de la av. Gran Chimú-Zárate, en el distrito limeño de San Juan de Lurigancho.
La víctima llevaba cinco días privado de su libertad. La tarde del lunes 8 de mayo fue sacado a rastras de su negocio por los Malditos Secos de Zárate, una banda integrada por delincuentes peruanos y venezolanos, que un mes antes había raptado al dueño de un night club y por quien pedían la suma de medio millón de soles para dejarlo libre.
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Ya en el segundo piso, los agentes revisan cuarto por cuarto para ubicar al empresario. Siete delincuentes que lo vigilaban huyeron al tercer piso para intentar escapar por una casa contigua.
— Positivo. Lo encontramos. Busquen a la gente, alerta uno efectivo mientras se escuchan disparos en el pasillo y vidrios rotos.
Paulo Huansi fue hallado echado boca arriba sobre un colchón viejo en el piso, con un polo que le tapaba los ojos. Fue escondido en una habitación de tres por dos metros en el segundo piso de un inmueble alquilado por ciudadanos venezolanos del sector La Cooperativa San Juan manzana D lote 1, distrito de San Martín de Porres.
Los agentes lo sientan y se identifican. “Somos la Policía y te estamos dando la libertad”, le dicen; pero el empresario tarda unos minutos en darse cuenta de que por fin está a salvo.
Paulo viste un polo plomo y una bermuda negra. Está descalzo y atado de pies y manos. Presenta cortes en el brazo derecho y manchas de sangre en la ropa. De inmediato, el general Luis Flores, jefe de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (Dirincri) lo calma.
— Este es un trabajo de inteligencia con la gente de Secuestros. Somos la Policía y ahora estás recuperando tu libertad, le dice al empresario, mientras otro agente le desata las cuerdas de sus manos y pies.
En paralelo, la Policía intervino otro inmueble, también en San Martín de Porres, en la urbanización Los Dominicos manzana L lote 18, donde se detuvo a otras nueve personas que participaron en el secuestro.
Los agentes decomisaron dos granadas, dos armas de fuego, dos vehículos de placas F5N-117 y ASO-528, drogas, sogas, una agenda con números de teléfonos de empresarios del cono norte de Lima y una balanza gramera.
Aquí están, ellos son
Estos son los delincuentes capturados en el operativo a los dos inmuebles: Eleazar Arce Pérez (42) alias Viejito; Wilfredo Hullca Quispe (37), alias Will; Juan Carlos Beroterán Berrios (25), Carlitos; Jeferson José Salas Graterol (26), Jefer; Joandri Alejandro Pérez (29), Ale (venezolano); Marlon Eumar Barrios Ruda (46), El Negro (venezolano); Henry Savier Escalona Sandoval (28), Henry (venezolano); Juan Carlos Laura Rivas (40), Juancho; José Javier Jiménez (34), alias José (venezolano); Yeixon Alexander Arjona Villorio (25), alias Yeixo (venezolano) y Victoria Lino Gómez (32), alias Vicky.
Así fue el secuestro de empresario
La tarde del lunes 8 de mayo, tras varios días de reglaje, los Malditos de Zárate perpetraron el secuestro de Paulo Huansi Loayza. Sabían todos sus movimientos y lo sacaron a rastras de su cebichería Purito Mar.
Un delincuente en moto, que cumplía la función de campana, vigilaba la zona, y tres miembros de la banda, quienes llevaban puestos mascarillas para evitar ser identificados, ingresaron al local de la cuadra 2 de la av. Gran Chimú-Zarate, en San Juan de Lurigancho.
El rapto tardó menos de dos minutos. Obligaron al empresario a subirse a un vehículo color gris y huyeron hasta el inmueble en San Martín de Porres, desde donde contactaron a los familiares. Les enviaron audios desgarradores para forzarlos a pagar medio millón de soles.
“Lo importante de esta captura es que hemos encontrado evidencia que nos hace presumir que estas personas han participado en el secuestro. Había croquis con el que le hicieron seguimiento, también detuvimos al conductor del vehículo en el que lo raptaron y a los que ingresaron a la cebichería”, contó el general Luis Flores, jefe de la Dirincri.
La Policía también sospecha que los Malditos de Zárate estén involucrados en el secuestro del empresario Oscar Payva Guadalupe (40), propietario del night club Molino Rojo, secuestrado desde el 16 hasta el 23 de abril de este año.
