El Consejo Directivo del Colegio Médico en La Libertad denunció la existencia de mafias vinculadas a expender certificados médicos falsos para trámites administrativos relacionados con descansos médicos indiscriminados.
Rafael Poma Gil, decano de la orden profesional en esta región norteña, indicó que nueve de 10 certificados médicos que se presentan en las instituciones son falsos.
“Se están presentado dos situaciones: el primero es la entrega de certificados médicos falsos y, lo segundo, presentan los certificados auténticos, pero falsifican el acto médico tomando nombres de algunos colegas sin que ellos se enteren. Falsifican sus firmas y sellos”, explicó.
Trujillo: Colegio Médico se pronuncia
Indicó que esta situación se registra en los distritos de Trujillo, La Esperanza, El Porvenir; así como en el Valle Chicama y Virú.
“Hemos detectado el uso indebido de información personal de los médicos. Solo en La Libertad, utilizan miles de certificados adulterados cada mes. Se están dando descansos médicos de forma indiscriminada a trabajadores de salud y también agroindustriales”, expresó Rafael Poma.
“El 90 % de los certificados son falsos. Hay un reducido número de certificados que son originales, pero el llenado de la información es falsificado. Se están aprovechando de la buena fe del Colegio Médico que es el encargado de la distribución de estos documentos”, prosiguió.
Antecedentes: lo que dice la Justicia
La Corte Suprema ha ratificado la gravedad de este acto al convalidar el despido de un trabajador por haber presentado un certificado médico falso para justificar su ausencia laboral. El caso, que se remonta al año 2015, involucra a la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria como la entidad demandada por el presunto despido injustificado.
La decisión de la Corte Suprema se basa en la Casación Nº 12381-2015-Lambayeque, donde se establece que la entrega de información falsa que otorga descanso por una inasistencia laboral constituye una falta grave que puede ameritar el despido del trabajador. En este caso específico, el tribunal determinó que el certificado médico presentado por el empleado en cuestión era falsificado.
Uno de los aspectos clave que respaldaron esta decisión fue el descubrimiento de que el médico que supuestamente había expedido el certificado no estaba registrado en el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (RENIEC). Además, no se encontraron registros que corroboraran la atención médica del trabajador en el hospital mencionado en el certificado médico.
La sentencia de la Corte Suprema envía un mensaje claro a los trabajadores y empleadores: la falsificación de certificados médicos no será tolerada y puede acarrear serias consecuencias legales. Más allá de la pérdida del empleo, este tipo de acciones minan la confianza dentro del entorno laboral y pueden tener repercusiones en la reputación profesional del individuo involucrado.