La banda criminal los Compadres estaría detrás del atentado terrorista a la sede del Ministerio Público de Trujillo.
Según informó el ministro del Interior, Juan José Santiváñez, esta organización, conocida por su accionar violento y su influencia en actividades ilícitas, habría asumido la autoría del ataque que generó daños materiales en el edificio y aumentó la sensación de inseguridad en la región.
La investigación tomó un giro clave tras una intervención realizada en el penal de Huacariz, en Cajamarca, donde se inspeccionó la celda de un reo vinculado a esta banda.
Durante el operativo, las autoridades incautaron cargadores y equipos de telefonía móvil que habrían sido utilizados para coordinar actividades ilícitas desde el interior del centro penitenciario.
La investigación tomó un giro clave tras una intervención realizada en el penal de Huacariz, en Cajamarca, donde se inspeccionó la celda de un reo vinculado a esta banda.
Este hallazgo refuerza la hipótesis de que los Compadres no solo estarían detrás del atentado, sino que además continúan operando activamente desde prisión, desafiando los sistemas de seguridad y control del Estado.
El ministro Santiváñez reveló esta información luego de la reunión con autoridades en la sede del Gobierno Regional de La Libertad.
Las autoridades han intensificado las acciones para desarticular a esta organización y prevenir futuros actos similares.

Sin embargo, el caso pone en evidencia las serias deficiencias en la seguridad de los penales del país y plantea preguntas urgentes sobre cómo cortar los vínculos entre las bandas criminales y sus redes externas, que parecen operar con total impunidad.
¿Quiénes son los Compadres?
En mayo del 2024, en una operación liderada simultáneamente por agentes de la sección de Investigaciones Especiales de la Región Policial La Libertad, se logró desarticular a la banda criminal autodenominada los Compadres Nueva Generación.
El megaoperativo, realizado en diversos distritos de Trujillo y otras localidades, culminó con la detención de 16 integrantes, el allanamiento de 18 viviendas y la intervención de tres celdas en penales.
Entre los capturados figuran Elvis Geiner Sifuentes Bustos (a) Candonguita o Candonga, señalado como uno de los cabecillas, y otros sujetos apodados el Borrego, Barbas o Barbucha, Sonaja, Maco o Mejeco, Nacho, Colorado y Pinky, entre otros.
Las acciones se ejecutaron en Huanchaco, La Esperanza, El Porvenir, Alto Trujillo y en las celdas de los penales El Milagro en Trujillo y Cambio Puente en Chimbote.

Durante la intervención, también se detuvo en flagrancia delictiva a Darlin Rosenda Armas Pino (36 años).
Los presuntos integrantes de esta organización delictiva enfrentan cargos por delitos de robo agravado, extorsión y otros crímenes que habrían perpetrado en diferentes puntos de Trujillo, causando temor entre los vecinos.
Las viviendas y celdas allanadas permitieron a las autoridades obtener pruebas clave para sustentar las acusaciones.
Otros Compadres
Asimismo, en julio del 2024, efectivos de la Dirección de Inteligencia de la Policía Nacional intervinieron a siete presuntos integrantes de la banda criminal los Compadres Segurity en el distrito de El Porvenir, Trujillo.
Los sujetos están implicados en delitos contra la seguridad pública, específicamente tenencia de materiales peligrosos, y contra el patrimonio, como extorsión.
La intervención se realizó tras un trabajo de inteligencia que llevó a los agentes a una vivienda utilizada como base de operaciones por esta organización.

Durante el operativo, fueron capturados Jorge Martín Domínguez Mallqui (19), alias Macho; José Antonio Hilario López (21), alias Negro; Daniel Alexander Reyes Flores (21), alias Pitbull; Jhonatan Smith Salaverry Escobar (19), alias Jonas; Wanly José Trujillo Narváez (18), alias Wachy; Steven Raúl Varas Sánchez (19), alias Terrible; y un menor de edad identificado con las iniciales KAFB (17), alias Ken.
En el registro del inmueble, los agentes incautaron cuatro cartuchos de dinamita, dos hojas con mensajes extorsivos, dos sobres de manila, dos billeteras y cinco teléfonos móviles, que serían utilizados para coordinar sus actividades ilícitas.