El reciente triple asesinato en Sullana, Piura, ha conmocionado a toda la región. El viernes 6 de septiembre de 2024, dos ingenieros civiles, Fabián Nima Cabrera y Kevin Palacios Zapata, fueron asesinados a quemarropa mientras se desplazaban en motocicleta hacia su lugar de trabajo.
Las víctimas laboraban en la construcción de un colegio en la zona de La Noria y se presume que su muerte está relacionada con el cobro de cupos.
Han pasado 6 días del terrible hecho y el jefe de la Región Policial de Piura, el comandante Manuel Farías Zapata, se ha pronunciado a medias sobre la situación del crimen y el sicariato en la ciudad.
Piura: Policía trabaja
Según Farías, existen datos esclarecedores sobre los decesos de los dos jóvenes; sin embargo, son de carácter privado. Promete que en los próximos días habrá más detalles sobre los asesinatos.
“Tenemos una información reservada que no podemos darle a conocer a la prensa, pero en esta semana ya tenemos noticias que sí hemos encontrado a los responsables”, declaró durante la inauguración de un puesto de auxilio rápido en la Upis Villa Jardín.
Además, contó que se han identificado a 6 bandas de delincuentes asociados a la extorsión en Sullana. En la misma línea, resaltó que la mayoría de los mensajes amenazantes provienen de reos en establecimientos penitenciarios.
Respecto al cobro de cupos, la Policía Nacional del Perú (PNP) ha reportado un incremento del 30 % en los delitos violentos en la región, lo que ha llevado a la población a exigir medidas más efectivas por parte de las autoridades.
En respuesta a la creciente violencia, el ministro del Interior, Juan José Santiváñez, anunció el despliegue de 1500 efectivos policiales para patrullar la zona y combatir el crimen organizado.
El decano del Colegio de Ingenieros de Piura, Hermer Alzamora Morán informó que la obra de La Noria (Sullana) está sin operaciones mientras no se actúe de manera inmediata por parte de las autoridades pertinentes.
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“Conversé con las personas que están laborando allí y dicen que la obra está paralizada y que no van a continuar hasta que brinden la seguridad del caso. Es más, han renunciado varios, los ingenieros ya no quieren trabajar”, afirmó.
Así mismo, destacó un hecho de similar índole ocurrido en la selva donde 4 ingenieros que laboraban en una obra habrían sido ahogados en un pozo.
Si bien el ministro del Interior, Juan José Santiváñez, impulsó un despliegue de 1,500 efectivos policiales para patrullar la zona y combatir el crimen organizado, para Alzamora hace falta una reunión conjunta con el Gobernador Regional y su posterior declaración a los medios de comunicación.
Desde su punto de vista, el estado de emergencia no funciona debido a que tiene un tiempo establecido donde varios agentes del orden se retiran y las bandas criminales reviven para seguir cometiendo actos sanguinarios.
