Corría la quincena de marzo de 2020 y la noticia que los liberteños no querían escuchar llegó: la Gerencia Regional de Salud de La Libertad (Geresa) confirmaba el primer caso de coronavirus en nuestra región. La paciente, que en aquel momento tenía 14 años y recién llegaba de unas vacaciones por Europa, se encontraba en aislamiento domiciliario en el distrito de Huanchaco. El comunicado de la autoridad llegó acompañado de un estado de emergencia y aislamiento social ordenado por el Gobierno nacional. La covid-19 había paralizado al país.
Paula (Buenapepa no publica los apellidos de los menores ni los nombres de sus padres en este artículo con el fin de proteger su privacidad) dos años después y a pocos días de haber cumplido 16, habla por primera vez con un medio de comunicación y, en declaraciones exclusivas, brinda detalles de los momentos más duros que le tocó vivir tras ser considerada oficialmente como la ‘paciente cero’ del coronavirus en La Libertad.
Viaje de ilusión y terror
Desde que tuvo el boleto en mano, Paula sabía que su primer viaje a Europa sería inolvidable. Lo que jamás imaginó es que a su regreso le tocaría vivir uno de los momentos más dramáticos de su vida junto a su hermana menor, abuela y tía, quienes la acompañaron en sus vacaciones.
Su paseo inició el 18 de diciembre de 2019, mes en que el coronavirus hacía su aparición ante el mundo en la ciudad de Wuhan, China. Su primer destino fue Madrid, capital española, donde estaría gran parte de su estadía en Europa. Fueron tres meses, en los cuales no solo conoció España, Alemania, Italia y Portugal; sino, también, África, en donde tuvo un paseo fugaz por Egipto.
Para su retorno a Perú, Paula embarcó desde Madrid el 10 de marzo de 2020 con la ilusión de volver a casa e iniciar sus clases escolares para reencontrarse con sus amigas y contar sus experiencias en Europa y África. Sin embargo, al pisar suelo trujillano, la menor de 14 años presentó gripe y fiebre, síntomas comunes de una enfermedad por conocer: la covid-19. Un día después fue sometida a las pruebas de descarte del coronavirus. El 12 del mismo mes conocidó los resultados: positivo.
“Yo nunca supe de mi contagio hasta que los vecinos de mi condominio me lo hicieron saber. Mi madre me puso en cuarentena desde que llegué a Trujillo y me dijo todo (las pruebas) había salido negativo. En redes sociales se dijeron muchas mentiras como que yo, al llegar de mi paseo, andaba por la calle con amigas. Eso fue una gran mentira. Del aeropuerto a mi casa vine en carro particular y de allí no salí hasta en tres meses”, fueron las primeras declaraciones de Paula.
Exposición e indignación
La información del primer caso de coronavirus en la región lo hizo público el gobernador de La Libertad, Manuel Llempén Coronel. Sostuvo que la menor llegó procedente de España y en seguida se le tomó la muestra. “Al enterarnos de la confirmación por el Instituto Nacional de Salud nos hemos acercado al domicilio y hemos comprobado que tiene buen estado de salud, y, muy responsablemente, se ha autoaislado; asimismo, vamos a recoger muestras de su familia”, afirmó a la autoridad.
De las cuatro personas que viajaron a Europa y África solo Paula se infectó. Su hermana, tía y abuela arrojaron negativo. La adolecente estaba en cuarentena hasta que, a través de redes sociales, una compañera de clase le compartió una noticia, en la cual el alcalde de Huanchaco, Estay García Castillo, revelaba el lugar de su domicilio.
El hostigamiento no se hizo esperar. Los vecinos de Paula, angustiados por las primeras cifras de contagios y muertes en el país provocadas por el coronavirus, le expresaron su indignación y, a partir de allí, la menor y su familia empezaron a vivir una verdadera pesadilla.
Paula, ¿qué es lo primero que te viene a la mente cuando recuerdas lo vivido tras dar positivo a la covid-19?
La furia de la gente, la de mis vecinos al enterarse que era la primera contagiada. Como te repito, yo no supe que estaba con el covid-19 hasta que ellos me lo hicieron saber. Inventaron muchas cosas, se dijeron un montón de cosas falsas. No solo la pasé mal yo, la pasó mal mi madre, mi abuela, mi hermana y todos mis primos que viven conmigo y que son menores de edad.
¿Qué fue lo peor que te dijeron?
Que me iban a quemar viva, que quemarían a toda mi familia. Querían botarnos de nuestra casa, que nos vayamos a otro lado. Crearon una lista con todos los integrantes de mi familia y lo hicieron pública.
¿Fueron en grupos a tu casa?
Sí, pasaban y gritaban esas cosas. También se crearon un grupo por WhatsApp y agregaron a mis familiares. Ahí escribían cosas irreproducibles. Fueron días de terror.
¿Dónde te contagiaste?
Sospecho que en Madrid o en el aeropuerto.
¿Nos puedes brindar más detalles?
El primer síntoma que tuve fue al llegar al aeropuerto de Trujillo: gripe. Yo casi nunca sufro de resfríos, pero al llegar a casa ya tenía fiebre. Pienso que fue en Madrid, donde ya había muchas personas contagiados por el virus. La otra opción es el aeropuerto al salir de Europa. Lo raro, o mejor dicho, lo bueno fue que mi abuela, mi tía y mi hermana no se contagiaron. Hubiese sido peor para nosotros.
¿Tus amigos de colegio se llegaron a enterar de tu contagio?
Solo mis amigas más cercanas. Yo les conté y fueron un gran apoyo en los momentos difíciles.
A tu llegada, ¿alguien de tu familia se contagió?
No. Mi madre me encerró y no dejó que salga ni a la puerta de mi dormitorio.
¿Cómo tomó tu familia de que el alcalde de Huanchaco (Estay García Castillo) reveló tu domicilio?
Nos afectó bastante. A raíz de eso empezó lo peor para nosotros. La gente nos reclamaba, nos gritaba; la verdad que los insultos me asustaron bastante. Los síntomas que tuve fueron leves, pero con eso recaí un poco. Fuerte. Luego, algo dentro de mí me tranquilizaba, con el apoyo de mi madre empecé a sentirme más fuerte.
¿Cuántas dosis de la vacuna contra el covid-19 tienes?
Tengo dos. Ya me toca la tercera, pero aún no llega el nuevo lote. Estoy a la espera de la tercera dosis.
¿Te volviste a reinfectar?
No, para nada. Solo una vez. Hoy ando con mucho más cuidado.
¿Has perdido familiares por la covid-19?
Gracias a Dios, no.
¿Tienes decidido qué carrera vas a estudiar?
Sí, Medicina. Sé que es una carrera difícil y larga, pero es mi sueño, mi objetivo. Acabo de cumplir 16 años, aún soy joven y veo mi carrera como un gran reto en mi vida.
¿Qué lección te deja la covid-19?
Que la unión familiar es lo más importante. Te confieso que a partir de mi contagio mi familia se unió más. En plena pesadilla, creamos un grupo de WhatsApp y orábamos todas las noches. Nos acercamos bastante a Dios. Fue algo hermoso ante tanta mala noticia para nosotros.
