El gobierno colombiano confirmó que Miguel Rodríguez Díaz, alias Cuchillo, quien es el principal sospechoso de la masacre de 13 mineros en Pataz, ingresó a su territorio el pasado lunes 5 de mayo en un vuelo procedente de Lima, sin que existiera requerimiento judicial alguno que obligara a su detención o impidiera su entrada.
La noticia llega en medio de la conmoción por el asesinato de los mineros y los cuestionamientos sobre la actuación de las autoridades en la captura y liberación del presunto cabecilla criminal.

Cuchillo no tenía alerta migratoria ni orden de captura
Según Migración Colombia, Rodríguez Díaz llegó a Bogotá a las 9:30 a.m. y fue admitido tras cumplir con los requisitos legales. La entidad explicó que «al no presentar ninguna alerta migratoria en los sistemas de control, se procedió a su admisión conforme a los protocolos establecidos«.
El organismo enfatizó que los controles migratorios dependen de la información disponible en tiempo real y que, de surgir nuevas solicitudes judiciales, Colombia actuará conforme a la ley ya los requerimientos de las autoridades peruanas e internacionales.

El historial migratorio de Cuchillo revela que no es la primera vez que viaja a Colombia: ya había ingresado el 5 de enero y el 3 de febrero de este año, y antes, en octubre de 2024, había estado en Chile.
Cuchillo y un prontuario marcado por la violencia minera
Miguel Rodríguez Díaz ha sido señalado por la presidenta Dina Boluarte como el principal responsable de la masacre en Pataz, ocurrida tras un enfrentamiento entre personal de seguridad de la empresa R&R y un grupo armado de parqueros liderados por él.

Su nombre aparece en al menos 13 investigaciones fiscales por delitos que incluyen homicidio, sicariato, extorsión, tenencia ilegal de armas y explosivos, y vínculos con el narcotráfico. Se le atribuyen ataques feroces a instalaciones mineras y la dirección de la banda criminal La Gran Alianza, tras la muerte de su anterior líder, Josué Blas Lezama, alias Gato Coté.
Fue detenido y liberado en el 2023
La salida de Cuchillo de Perú se produjo solo horas después de que Boluarte denunciara públicamente que, pese a haber sido capturado por la Policía Nacional en 2023, fue liberado por decisión del Ministerio Público. Boluarte criticó el accionar fiscal: «¿En qué quedamos? Capturamos a los delincuentes, los ponemos a disposición del Ministerio Público y ellos los liberan (…) No es lavarnos las manos, estamos poniendo en evidencia dónde está la responsabilidad».

El fiscal provincial de Casma, Edwin Ramos, explicó que la intervención policial de 2023 no cumplió los protocolos legales: la detención se realizó sin avisar a la fiscalía de turno y las armas incautadas estaban inoperativas, lo que impidió formalizar cargos y derivó en la liberación de Rodríguez Díaz tras 48 horas, al no existir pruebas suficientes.

Según un colaborador citado por Canal N, la masacre de los 13 mineros estaría vinculada a un enfrentamiento armado por el control de un socavón estratégico en Pataz. Tras la muerte de cinco miembros del grupo contrario, algunos trabajadores fueron secuestrados y posteriormente ejecutados, en lo que sería una represalia dentro de la guerra por el control del oro ilegal.
Mientras tanto, la Policía Nacional de Perú y las autoridades internacionales mantienen la búsqueda de Cuchillo, quien ahora permanece prófugo en Colombia, país que ha reiterado su disposición a colaborar si se emiten nuevas alertas judiciales o órdenes de extradición.