Era uno de los hombres más buscados por la Policía durante las últimas semanas en Trujillo y esto era lo que se sabía de él: era de tez morena, de 1.70 metros de altura aproximadamente. La última vez que lo vieron vestía polo rojo, pantalón negro y zapatillas blancas. De nacionalidad venezolana y respondía al alias de Gringo.
Con esta información básica —obtenida por las cámaras de seguridad de Víctor Larco y las declaraciones de otros dos delincuentes, actualmente presos en el penal El Milagro—, la Policía Nacional inició la búsqueda del autor material del crimen del abogado Marco Antonio Gutiérrez Araujo, asesinado a balazos la mañana del viernes 24 de marzo en el estacionamiento del Banco de Crédito del Perú (BCP) de la avenida Larco.
Aunque la búsqueda de alias Gringo oficialmente continúa, el caso ha dado un giro inesperado. Diecinueve días después del homicidio que conmocionó a la capital liberteña, quien fue su autor material habría sido asesinado.
Fuentes consultadas por BuenaPepa indicaron que existe la probabilidad de que alias Gringo haya sido asesinado para silenciarlo. Esta versión cobró fuerza, sobre todo, luego de que los otros dos implicados en el crimen —el conductor de la moto que lo trasladó antes y después del homicidio y el hombre que lo contactó para llevarlo a cabo— fueran detenidos en tiempo récord por personal de Homicidios de la División de Investigación Criminal (Divincri).
Este medio contactó al coronel Javier Méndez Yupanqui, jefe de la Divincri, para conocer más detalles sobre la investigación y admitió que esta versión está en proceso de corroboración.
“Todavía el sicario no ha sido identificado plenamente. Tenemos la información que se ha cotejado sobre su apariencia, su alias. Estamos tratando de ubicarlo. Pero se sabe que muy posiblemente haya sido asesinado. No hay nada concreto, en realidad estamos corroborando esa información. Queremos llegar hasta el fondo del asunto”, declaró a BuenaPepa.
Así se perpetró el crimen en Trujillo
Gringo no operó solo. El día que acabó con la vida del jurista Marco Antonio Gutiérrez Araujo, actuó en complicidad de Josías Alejandro Paredes Aguilar de 18 años, alias Josías. Tras su detención, Josías admitió ser el conductor de la moto lineal marca Pulsar con placa de rodaje 5543-AT. En este vehículo, robado en Virú en diciembre del 2022, trasladó a Gringo hasta la cuadra diecisiete de la avenida Larco, en Trujillo, donde se ubica la agencia del BCP.
Estamos tratando de ubicarlo. Pero se sabe que muy posiblemente haya sido asesinado. No hay nada concreto, en realidad estamos corroborando esa información.
— Javier Méndez Yupanqui, jefe de la Divincri Trujillo
La víctima había acudido al banco, pasada las 10:30 de la mañana, para retirar cuatro mil soles; sin saber que era seguido por dos delincuentes que tenían el objetivo de acabar con su vida.
Casi una hora después, cuando abandonó el banco y se retiraba en su camioneta, Gringo descendió de la moto, corrió hasta el asiento del conductor y le disparó seis veces a quemarropa. Paradójicamente, ese viernes 24 estuvo de visita en Trujillo la presidenta Dina Boluarte junto al ministro del Interior, Vicente Romero, y otros miembros del gabinete ministerial.
Los testigos del hecho, quienes conversaron con este medio, indicaron que Marco Antonio Gutiérrez Araujo intentó descender del vehículo, pero no lo consiguió. Se echó en el asiento del copiloto y murió tras algunos minutos de agonía.
El sicario subió otra vez a la moto, conducida por alias Josías, y ambos huyeron por la calle Las Magnolias hasta la avenida Fátima, para luego continuar con su ruta por la avenida Húsares de Junín.
Un día después, sábado 25 de marzo, al promediar las diez de la noche, la Policía capturó a Josías en el hotel JPQ, ubicado en la intersección de las calles Huáscar y San Luis, en el distrito El Porvenir. Agentes de la Dirección de Inteligencia Regional lo inmovilizaron cuando ingresaba al local.
Gordo Albert (izquierda) y Josías (derecha) ya están en el penal El Milagro. El primero fue quien contactó al sicario venezolano, y el segundo fue el que lo trasladó antes y después del crimen.
En el interrogatorio este delincuente confesó ser el conductor del vehículo menor y aceptó haber cobrado la suma de 1300 soles, aunque declaró a los agentes que no sabía que el ‘trabajo’ era asesinar al abogado Marco Antonio Gutiérrez Araujo.
Su testimonio fue clave para que la Policía detenga al hombre que captó a alias Josías y Gringo para perpetrar el homicidio. Se trata de Luis Albert Huayán Valdez de 21 años, alias Gordo Albert.
De acuerdo al registro policial, Gordo Albert registra antecedentes por hurto de vehículo (2022), delito contra el patrimonio en la modalidad de receptación (2021) y robo agravado (2020). Gordo Albert también vive en Alto Trujillo, barrio Tres.
Para la Policía, una banda de El Porvenir, dedicada al tráfico de terrenos, ordenó la muerte del letrado, quien dejó dos hijos menores en orfandad. Se sabe que Marco Antonio Gutiérrez Araujo era especialista en litigios de terrenos y habría sido asesinado como venganza por una disputa de predios.