La población de El Porvenir, en Trujillo, se encuentra conmocionada por un caso de violencia sexual infantil que ha llegado a su fin con una condena ejemplar. La fiscal Angélica Rocío Castillo Obregón, de la Fiscalía Provincial Mixta Corporativa, logró una sentencia condenatoria contra los responsables de un acto atroz que ha dejado cicatrices imborrables.
Trujillo: padrastro y madre son los culpables
Los hechos que llevaron a esta sentencia a cadena perpetua ocurrieron el 29 de julio de 2021. Ese día, efectivos de la Policía Nacional de la comisaría Nicolás Alcázar de El Porvenir recibieron una llamada del Hospital Santa Isabel. La médica de turno informó sobre una menor de edad que había sido ingresada por un hombre, quien la había abandonado en el hospital. La niña presentaba graves lesiones y se encontraba inconsciente. El diagnóstico era alarmante: intoxicación por alcohol, deshidratación, lesiones múltiples en el cuerpo y signos de maltrato infantil.
Quince minutos después, la madre de la niña, identificada como J.L.D.A., llegó al hospital. Aunque inicialmente alegó que la niña se había caído y había ingerido alcohol, más tarde admitió que el responsable de llevar a la menor al hospital era su nuevo compromiso, A. C. E.
El médico legista Raúl Pérez Jiménez, de la División Médico Legal, emitió un certificado médico legal que reveló la magnitud del horror. La menor presentaba signos de lesiones traumáticas recientes en los genitales, indicios de actos contranatura, quemaduras en el tórax posterior y la mano derecha, así como lesiones traumáticas múltiples en el tórax y el abdomen.
La Fiscalía reunió pruebas contundentes y solicitó la prisión preventiva tanto para el padrastro como para la madre de la niña. La justicia concedió esta solicitud.
Durante el proceso, la fiscal Angélica Castillo Obregón presentó un requerimiento de acusación en el que imputó al padrastro el delito de violación sexual de menor. Respecto a la madre, se le acusó de complicidad primaria en dicho delito. Además, se formularon cargos por delito de lesiones en contra de la menor.
Morirán en prisión
El juicio oral que siguió fue un proceso doloroso, pero necesario. Tras escuchar las pruebas presentadas y la tesis de la fiscal, se emitió una sentencia condenatoria. El padrastro fue condenado a cadena perpetua como autor del delito de violación sexual en agravio de la menor. La madre de la niña también fue sentenciada a cadena perpetua como cómplice primaria de este terrible crimen. Además, se les ordenó pagar una reparación civil de veinte mil soles.
Las autoridades indicar que el camino hacia la recuperación de la menor será largo, pero esta sentencia representa un paso crucial en su búsqueda de justicia y sanación.
