Emiliano Paico Zumaeta, el joven que disparó y mató a un perro de raza rottweiler de nombre Teo, en Trujillo, cuando paseaba en un parque de la urbanización Primavera, será internado en el penal El Milagro.
El Poder Judicial revocó la medida de comparecencia con restricciones que le impuso el Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Superior de Justicia de La Libertad, el 28 de febrero de este año, y dispuso su detención y traslado a la cárcel de Trujillo de forma preventiva por nueve meses.
Fue la Primera Sala Penal de Apelaciones de la Corte liberteña —integrada por los magistrados Oscar Alarcón Montoya (presidente), Manuel Loyola Florián (director de debates) y Julio Neyra Barrantes— la que consideró que existían elementos de convicción para aceptar la apelación del Ministerio Público y variar el fallo judicial impuesto hace dos meses.
La Fiscalía solicitó la prisión preventiva por la comisión de tres presuntos delitos: peligro por medio de incendio o explosión, manipulación en estado de ebriedad o drogadicción, así como abandono y actos de crueldad contra animales domésticos y silvestres.
“Es importante que el Poder Judicial dicte sentencias contra personas que cometen actos de crueldad contra animales porque como sociedad debemos ser conscientes del respeto que estos seres vivos merecen y que el aprovechamiento de estos sea para fines de alimentación o solo necesario”, declaró el juez Walther Huayllani Choquepuma, de la Corte Superior de Lima, sobre la solicitud de prisión preventiva del Ministerio Público en contra de Emiliano Paico Zumaeta.
Agregó que “nada asegura que quienes cometan estos delitos agredan a ancianos, menores de edad y mujeres; entonces, el Poder Judicial tiene que prever y educar a través de estas sentencias, de que cualquier acto de violencia o agresión tiene que ser proscrito”.
Según la ley penal, crueldad contra animales se define como la conducta que les causa o genera dolor innecesario, nerviosismo, sufrimiento y angustia; la cual se sanciona con una pena no mayor de tres años de prisión (simple), y entre tres y cinco años de cárcel cuando el animal muere (agravada).
En el caso de ser reincidente, la persona puede ser sentenciada hasta ocho años de prisión.
Así ocurrió el ataque en Trujillo
Pasada la medianoche del 25 de febrero, Emiliano Paico Zumaeta sacó a pasear a su mascota al parque Inmaculada Concepción de la urbanización Primavera.
Teo, un cachorro rottweiler que también salió a pasear con su dueño, se le acercó a la mascota de Emiliano Paico y recibió cuatro disparos.
Pese a que el agresor justificó el uso su arma de fuego aduciendo defensa propia, los vecinos indicaron que el rottweiler llevaba puesto un bozal.
“El hombre ha venido y porque el perro se le acercó a su mascota, sacó su arma, le disparó y le metió cuatro tiros a la mascota. Lo ha matado a sangre fría”, indicó una vecina.
Emiliano Paico, quien en su perfil de redes sociales asegura ser instructor personalizado de armas de fuego, quedó detenido en la comisaría El Alambre y luego pasó a carceleta del Poder Judicial.
Aquella vez, el Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Superior de La Libertad declaró infundado el pedido de prisión preventiva en su contra y solo le fijó una reparación civil de 5 mil soles.
Esa medida fue revocada por la Primera Sala Penal de Apelaciones y Emiliano Paico deberá ser internado en el centro penitenciario El Milagro.