Ni la presencia de su menor hijo ni las reiteradas intervenciones de los vecinos impidió a Ulises Oswaldo Ramos Mejía cambiar su proceder violento. Este ciudadano venezolano fue sentenciado a seis años de cárcel tras la decisión unánime del Sétimo Juzgado Penal Unipersonal de Trujillo.
El fallo judicial se aprobó después de que el denunciado forzara una serie de asaltos físicos y psicológicos a su conviviente y madre de su hijo menor, K.A. B. G. La moción de sentencia fue solicitada por la fiscal provincial Julia Sánchez Susanibar, la cual lidera el equipo dos de la Fiscalía Provincial Corporativa Especializada en Delitos de Lesiones y Agresiones contra la Mujer e Integrantes del Grupo Familiar.
Trujillo: así fueron las constantes agresiones
Los delitos, elaborados en una serie de concursos, necesitaron un total de seis años de prisión. El primer incidente se produjo el 9 de julio de 2021 cuando la víctima fue asaltada en su habitación, recibiendo un puñetazo en el rostro. Ramos Mejía también robó su celular.
El segundo ataque ocurrió el 15 de febrero de 2022, cuando el acusado la golpeó de nuevo con puñetes en la cara y patadas en diversas partes del cuerpo, además de impedirle salir de su habitación y pedir ayuda. La mujer fue ahorcada por su conviviente para que no grite; para su suerte, la dueña del cuarto escuchó la agresión y fue en su auxilio.
El tercero hecho sucedió cinco meses después, el 29 de julio de 2022, cuando la víctima fue atacada por su conviviente ebrio por cuestionar el uso de su dinero. Fue golpeada en el rostro y arrastrada por el cabello antes de finalmente poder escapar y ser auxiliada por un joven policía.
Extranjero amenazó con apuñalarla
El último ataque, el 16 de abril de 2023, se intensificó aún más cuando la víctima fue acosada mientras descansaba en su habitación con su hijo menor. Después de una confrontación violenta, en la que también volvió a ahorcarla, el acusado se llevó al niño y amenazó a la mujer con apuñalarla.
Además de la sentencia de prisión, Ramos Mejía ha sido condenado a pagar una reparación civil a la víctima de 2500 soles.
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