El polémico paro liderado por los ronderos contra la minera operando en el distrito de Pataz está causando estragos en la vida de al menos cinco mil ciudadanos, incluyendo empresarios y emprendedores locales. Las zonas afectadas, como Los Alisos, Pueblo Nuevo y otros anexos del distrito de Pataz, sufren los bloqueos de vías, lo que ha generado tensiones en la comunidad.
En respuesta a esta situación, cientos de ciudadanos organizados han llevado a cabo una manifestación de paz en el cruce de la zona conocida como Calquiche, buscando llamar la atención de las autoridades y demandar la suspensión urgente del paro vehicular que les impide llevar a cabo sus actividades diarias.
Luis Cueva Rojas, representante comunal de Vijus, expresó su preocupación por los miles de emprendedores y pequeños empresarios patacinos que se encuentran sin trabajo debido a la paralización. La situación afecta no solo a ellos, sino también a sus familias, resultando en una gran cantidad de personas afectadas económicamente.
Pobladores y autoridades buscan solución
“Estamos hablando de más de mil patacinos emprendedores, pequeños empresarios. Contando que cada uno tiene su familia, una canasta familiar de 5 o 6 personas. Fuera de las que Poderosa contrata y vienen de lejos. Es una gran suma también que se está quedando sin trabajo”, Precisó Luis Cueva Rojas, representante comunal de Vijus.
El plantón, iniciado el miércoles 19 a medianoche, tiene como objetivo recuperar el derecho al trabajo y restaurar la normalidad en la región. Los manifestantes exigen que el alcalde distrital, Segundo Armas Villalobos, represente los intereses de todos los ciudadanos, independientemente de si están a favor o en contra del paro.
Sin embargo, la legitimidad del paro liderado por los ronderos ha sido objeto de cuestionamiento durante casi un mes de protestas. El especialista y analista sociopolítico Pedro Yaranga ha señalado la posible presencia de intereses de mafias detrás de estas medidas de fuerza.
Además, se han planteado dudas sobre quién permite el paso de los volquetes de mineros ilegales mientras las vías están bloqueadas por los ronderos.
Ante este panorama, la población de Pataz enfrenta una crisis laboral y social, mientras que las protestas aumentan y la tensión aumenta en la región minera. Los ciudadanos esperan una pronta intervención de las autoridades para buscar una solución justa y equitativa que se beneficie a toda la comunidad afectada.