A pesar de las llamadas amenazantes a su familia, en las que exigían un rescate multimillonario, y de estar atrapada en un macabro juego con sus secuestradores, Lucero Trujillo Vargas logró burlar su confinamiento.
Secuestrada en Comas, la valiente joven, hija de una empresaria de frigoríficos, vivió una pesadilla al ser capturada y retenida durante más de 72 horas, pero aprovechó un momento de distracción de sus captores para escapar.
Así huyó Lucero de los secuestradores
Según fuentes policiales, Trujillo fue raptada el pasado 7 de noviembre y mantenida en cautiverio en una casa en Carabayllo. Atrapada, temerosa, pero valiente, Lucero soportó su horrible cautiverio mientras pugnaba por la libertad.
Buscó ayuda a través de las rejas que la encarcelaban, gritó con todas sus fuerzas hasta conseguir que los vecinos la oyeran. “Este es un momento de terror que ella soporta, pero que finalmente logra escapar”, declaró el Gral PNP Óscar Arriola, director nacional de Investigación Criminal.
“Ella escucha que sus captores dicen ‘ahí está la policía, viene la policía’ y la abandonan allí. Ella se deshace de sus ataduras y huye de la casa para pedir ayuda”.
Los residentes locales, al verla encerrada y desesperada, la auxiliaron. La joven consiguió llegar a una dependencia policial. Luego de recibir atención médica básica, se iniciaron las gestiones para ubicar a su familia.
Paralelamente, un equipo especial de la División de Investigación de Secuestros y Peritos de la Unidad Básica Desconcentrada de la Policía Nacional del Perú (Depincri) comenzó a investigar el lugar donde fue retenida Trujillo, con la esperanza de desentrañar pistas que conduzcan a sus secuestradores.
“Este fallo en el intento de secuestro es un golpe a la impunidad”, indicó Arriola. “No se pagó ningún rescate. Ahora, tendremos mucha información que nos ayudará a identificar a los responsables”.
Lima: ¿Quiénes vivían en la casa donde fue retenida Lucero?
Vecinos de la vivienda de Trujillo revelaron que la casa era ocupada por una pareja conformada por un ciudadano peruano, oriundo de Cajamarca, y una mujer de nacionalidad venezolana.
Sin embargo, los residentes locales también mencionaron que la pareja llevaba un estilo de vida problemático y ruidoso, con gente extraña frecuentemente visitando la casa. El secuestro ocurrió el pasado 7 de noviembre cuando tres sujetos, a bordo de una camioneta Toyota roja, se apoderaron de Trujillo en un local de su propiedad. El vehículo fue reportado como robado dos días antes del secuestro y finalmente fue localizado en Ventanilla el 8 de noviembre.
La PNP sigue adelante con la investigaciones y la victima permanece en Depincri proporcionando detalles cruciales sobre su experiencia. El hecho de que Trujillo haya logrado escapar de un secuestro tan horripilante es un verdadero testimonio de su coraje y resiliencia. Sin embargo, el caso también destaca la cruda realidad del peligro del secuestro y la extorsión en Perú, poniendo de relieve la necesidad de una mayor seguridad y prevención.