Lamine Yamal y Endrick, ambos de 16 y 17 años respectivamente, protagonizaron un emocionante enfrentamiento en el estadio Santiago Bernabéu, eclipsando la importancia del partido España-Brasil.
La Roja estuvo cerca de la victoria con dos penales polémicos a su favor, pero terminó cediendo un empate inesperado con un penal absurdo en el último minuto, que permitió a Paquetá sellar la igualada (3-3).
El enfrentamiento, que se anticipaba como un duelo de prestigio, vio a España desplegar su mejor versión, con una identidad ofensiva marcada por el cambio de sistema de Luis de la Fuente, diseñado para aprovechar al máximo la presencia de extremos destacados como Lamine Yamal y Nico Williams. La actuación destacada de Dani Olmo y Álvaro Morata también fue fundamental en el once español.
España dominador
En la primera mitad, España dominó sobre Brasil, mostrando una superioridad evidente, y consolidándolo con un tanto de penal Rodrigo Hernández (12’) y otro tanto de Dani Olmos (36’); pero un error en la salida de juego de Unai Simón permitió a Rodrygo (40’) marcar y revivir a un equipo brasileño que parecía desaparecido.
Los jóvenes talentos españoles, especialmente Nico Williams y Lamine Yamal, fueron protagonistas destacados en el partido, mostrando su habilidad y desequilibrio en el campo.
Yamal, en particular, con solo 16 años, demostró una madurez impresionante y causó estragos en la defensa brasileña, que encontró la igualdad a los 50’ a través de otra promesa del fútbol mundial: Endrick.
Rodrigo Hernández, a tres del final (87’), puso en ventaja para la Roja. A partir de allí, los locales parecían hacerse de la victoria. Sin embargo, pesar de los esfuerzos de España por ampliar su ventaja, un error evitable permitió a Brasil igualar el marcador, dejando a España con sentimientos de frustración. Paquetá, a los 90+6’, decretó el empate en Madrid.
Brasil festeja, España lo lamenta
A medida que avanzaba el partido, España recuperó su confianza y liderazgo, pero no pudo capitalizar sus oportunidades para asegurar la victoria. Unai Simón salvó a España en momentos críticos, pero un penal claro en los últimos minutos permitió a Brasil igualar el marcador, dejando a España con un sabor amargo.
En resumen, fue un partido emocionante en el que España mostró destellos de su calidad, pero no pudo cerrar el partido cuando estaba en control, lo que le costó la victoria frente a un Brasil que luchó hasta el final.