Inicio¡Qué Palta!DenunciaMuerte en Gineclinik: denuncian por homicidio a médico que trató a enfermera

Muerte en Gineclinik: denuncian por homicidio a médico que trató a enfermera

Los familiares de la enfermera Teresa Zegarra Guerrero, quien falleció el pasado 28 de marzo en extrañas circunstancias en la clínica Gineclinik, presentaron una denuncia formal contra el médico David Chacha Vargas, principal sospechoso de la muerte de la profesional de salud de 30 años. 

“Hemos denunciado tipificándolo como homicidio culposo. Además, estamos en proceso preliminar de investigación para determinar si este lugar (clínica Gineclinik) cuenta con licencia porque, según las declaraciones del mismo ginecólogo, no tienen los equipamientos para una emergencia”, señaló el abogado de la familia, Rusel Carbajal Sangama.

Según el artículo 111 del Código Penal del Perú, un homicidio culposo alude a la muerte provocada por una persona sin intencionalidad. Es decir, la muerte se comete por imprudencia, negligencia o impericia; pero sin que el autor haya tenido intención de matar ni de provocar la muerte, como sí ocurre en el homicidio agravado. 

El pasado lunes 28 de marzo, la enfermera Teresa Zegarra Guerrero llegó, junto a su esposo, Jesús Sedano, hasta la Gineclinik, ubicada en la urbanización Santa Inés, para continuar con su tratamiento para poder ser madre. El procedimiento al que debía someterse ese día iba a tarde unos diez minutos; sin embargo, algo salió mal que perdió la vida. “Solo se iba a colocar una inyección, pero han ingresado también un anestesiólogo y una ginecóloga”, aseguró el abogado Carbajal. 

Zegarra trabajó en el hospital Belén y la clínica
San Pablo. (Foto: Cortesía).

El ginecólogo David Chacha Vargas continúa trabajando en GinecliniK; sin embargo, ya no mantiene ningún tipo de contacto con los familiares de la víctima. Por otro lado, el esposo, hermanos, primos, vecinos y colegas de la profesional en salud continúan exigiendo que las autoridades judiciales cumplan sus funciones con transparencia.

La noche del 29 de marzo, la fiscal Tula Huancahuire Aguilar señaló que la muerte de Luisa Zegarra se podría deber a un quiste cerebral, información que contradice los resultados de los chequeos generales, a los que anualmente se sometía la enfermera. “La necropsia arroja resultados que contradicen los chequeos generales que venía realizando la esposa de mi patrocinado”, declaró Carbajal. 

Por el momento, el jurista ha demandado la necesidad de una pericia de parte y está a la espera del registro de las cámaras de vigilancia para continuar con las diligencias correspondientes. “A más tardar, los videos de lo que pasó el día lunes 28, lo tendremos para mañana (hoy viernes). Poco a poco, se irá esclareciendo este suceso. A la par, haremos una pericia de parte porque no estamos de acuerdo con los resultados de la necropsia. Esperemos que las autoridades judiciales hagan bien su trabajo”, anheló.

Aún hay cosas confusas
Los resultados de la necropsia indicaron que la hora de la muerte data a las 14:40 horas del día lunes 28 de marzo; no obstante, según el presunto responsable, David Chacha Vargas, su paciente murió a las 15:30 p.m., camino al hospital Regional. 

El procedimiento al que debía somerterse ese día iba a tarde unos diez minutos; sin embargo, algo salió mal que perdió la vida. “Solo se iba a colocar una inyección, pero han ingresado también un anestesiólogo y una ginecóloga”, aseguró el abogado Carbajal.

El esposo de Teresa, Jesús Sedano, afirmó que el médico iba a trasladar a su esposa al hospital Regional sin su conocimiento ni consentimiento. “El doctor David Chacha no me dejó ingresar al consultorio. Eso me pareció raro. Además, asistimos a la cita para que le aplicaran una ampolla como parte de su tratamiento de fertilidad. Como ella sabe de esa cosas, le pareció raro que un anestesiólogo y otra ginecóloga estuvieran presentes. Ahora, consultando a sus colegas, nos hemos enterado que ella debía estar 10 minutos como máximo; sin embargo, estuvieron como más de 50 minutos. Esto es muy extraño. Quizá tenía en mente realizar otro tipo de intervención”, declaró indignado el ahora viudo. 

Homenaje póstumo
El miércoles 30 de marzo, día del último adiós al cuerpo de Luisa Zegarra, en el Hospital Belén, se brindó un emotivo homenaje. “Siempre estarás presente en nuestros pensamientos y corazones. ¡Luisa Teresa Zegarra Guerrero presente!”, publicó la Oficina de Relaciones Públicas del Hospital Belén de Trujillo, en sus redes sociales, adjuntando fotos de dicha ceremonia. 

El doctor David Chacha Vargas tiene mucho que responder en este caso. (Foto: Cortesía).

En la misma ceremonia, los amigos de la fallecida expresaron que les parece extraño que el médico Chacha no se atreva a dar declaraciones, ni siquiera disculpas por su actuación que terminó con la muerte de una de sus pacientes. “Luisa es personal de salud. Ella lo conocía a David Chacha, ya que, en una oportunidad, lo asistió en una de sus intervenciones médicas. Me sorprende que ni siquiera pida disculpas a los deudos”, comentó una de las amigas y colegas de Luisa Zegarra.

Asimismo, la Superintendencia Nacional de Salud (SuSalud) se contactó con los familiares de Luisa Zegarra para recoger información tanto de los hechos, así como del funcionamiento de Gineclinik. “Nos corresponde investigar. Si se encuentra un hecho irregular, se abre un proceso administrativo sancionador y, de acuerdo a ello, se determina el rango de gravedad que puede variar desde 500 UIT hasta el cierre definitivo del establecimiento”, comentó la una trabajadora del área de comunicaciones de este organismo.

 

Vivián Fernández Sevillano
Vivián Fernández Sevillano
Nació en Trujillo, una ciudad predispuesta para la cosecha de mangos. Por ende, era la fruta que más abundaba en su casa durante el verano. Además de su dulzura y buena pepa, este tropical comestible le enseñó lo que es la madurez de los vegetales y a no dejarse llevar por las apariencias. Ahora, esas enseñanzas le sirven en su actividad periodística, la misma que orienta hacia el bienestar de las familias. El secreto, dice, está en enamorarse del proceso que implica la búsqueda de la verdad, y más en los días de lluvia.