InicioFruta frescaProtestas sociales: es seguro que el Perú sufra una crisis alimentaria

Protestas sociales: es seguro que el Perú sufra una crisis alimentaria

El Perú sufrirá de una inminente crisis alimentaria debido al desabastecimiento de los mercados a causa de los bloqueos de carreteras registrados en distintos puntos del país, advirtieron los gremios agrarios, avícolas y ganadores. 

La Asociación de Ganaderos Lecheros de Majes (AGAL Majes), la Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú, la Asociación Peruana de Porcicultores y la Asociación Peruana de Avicultura (APA) exigieron al Gobierno que haga cumplir la ley para solucionar este problema. Así mismo, llamaron al Congreso de la República a acordar pronto el adelanto de elecciones. 

En conferencia de prensa, los colectivos advirtieron que desde que estalló la crisis social —diciembre del 2022— el entorpecimiento de la cadena logística de alimentos está provocando un severo desabastecimiento y subida en los costos, no solo en las ciudades donde se registran más protestas, sino en el todo el Perú.

Citaron que, por estos días, en Cusco un kilo de huevo en el Cusco está llega a costar 11 soles, y en Ica, las amas de casa deben pagar 18 soles el kilo de pollo.

Sostuvieron que las consecuencias de este panorama es el aumento del precio de los productos y la merma de los ingresos de los comerciantes. Además, los transportistas también están dejando de percibir ingresos. Por último, y no menos graves, es la pérdida de empleos en empresas pequeñas, medianas y grandes.

En Cusco un kilo de huevo en el Cusco está llega a costar 11 soles, y en Ica, las amas de casa deben pagar 18 soles el kilo de pollo.

“El sector agrario ha llegado a una escenario límite, donde no se permite ni cosechar ni llegar a los mercados, lo cual afecta, principalmente, a los peruanos de bajos recursos. La papa, con respecto al 2022, ha subido en Lima 75 %; en la Libertad, 112 %, y en Madre de Dios, una de las ciudades en donde hay consecuencias más dramáticas, 127 %”, indicó el presidente de la Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú (AGAP), Alejando Fuentes.

Pollito sin papas

El sector avícola, que produce huevo y pollo, alimentos que representan el 70 % del consumo de proteína de los peruanos, además de ser el sostén económico de casi dos millones de ciudadanos, también sufre de manera severa las consecuencias del estadillo social.

“No podemos ingresar nuestros productos a los mercados, no podemos ingresar pollos bebé ni alimentos a nuestras granjas, y la soya, que es parte básica de la dieta de nuestras aves, es abastecida en un 80 % desde Bolivia y no puede ingresar hace dos meses al país debido a los bloqueos” informó presidente de la Asociación Peruana de Avicultura (APA), Julio Favre.

Insumos y productores de la industria de alimentos del Perú no llegan a su destino. (Foto: cortesía).

Crisis alimentaria a la enésima potencia

Por su parte, los productores de lácteos (producto a base de leche) dimensionaron el calvario que sufren desde el inicio de la crisis y exigieron ayuda para que retomen el camino de la recuperación económica, luego de la pandemia de la covid-19.

“Desde que iniciaron las protestas en diciembre, nosotros hemos perdido el 50 % de la producción de leche. Antes de diciembre nosotros producíamos, en el sur del Perú, 1 millón 200 mil kilos de leche por día, ahora solo estamos produciendo 600 mil kilos de leche por día. Esto va a generar un incremento en los costos”, mencionó presidente de la Asociación de Ganaderos Lecheros de Majes (AGAL Majes), Oscar Vilca.

Finalmente, el gremio porcicultor enumeró los inconvenientes que el sector sufre desde que empezó el bloque de las vías de comunicación. “Tenemos inconvenientes para alimentar de forma eficiente a nuestros animales, cientos de ellos están muriendo por la falta de insumos, los cuales se encuentran varados en las vías tomadas por los protestantes”, señaló Gustavo Robinson, vicepresidente de la Asociación Peruana de Porcicultores.

De no solucionarse el bloque de carreteras inmediatamente en pocas semanas se producirá una crisis alimentaria ya que las familias no podrán soportar el incremento de precios.