Arturo Fernández Bazán se fue de la Municipalidad Provincial de Trujillo. El Jurado Nacional de Elecciones le retiró las credenciales como alcalde tras debatir su caso este martes 9 de enero. Apenas trece minutos duró la sesión virtual, en la que los tribunos revisaron el pedido del burgomaestre, quien buscaba anular la suspensión impuesta por el concejo provincial.
Aunque muchos opositores a su gestión celebraron la medida, sus seguidores aguardan la esperanza de que vuelva a ocupar el sillón municipal. Esta situación podría ocurrir en junio del 2023, luego de que Arturo Fernández cumpla la condena de un año de pena privativa de la libertad suspendida, por el delito de difamación agravada, que fue ratificada por el Poder Judicial el 20 de junio de 2023.
Arturo Fernández: vacancia evitaría su regreso
Sin embargo, el concejo también tramita un proceso de vacancia para evitar, de manera definitiva, la vuelta de la polémica autoridad. Para este caso, también, las acciones parten de la condena por difamación agravada.
En este escenario, la Corte Suprema jugará un papel clave. El máximo órgano encargado de administrar justicia en el país deberá resolver un recurso legal presentado por la defensa de Arturo Fernández: la queja de derecho.
Este recurso legal es un medio impugnatorio que se interpone contra una resolución que declara inadmisible una apelación. Con esta demanda, Arturo Fernández busca derogar la sentencia por difamación agravada y, como un castillo de naipes, anular la sanción impuesta por el concejo y volver a la Alcaldía de Trujillo.
“A Arturo Fernández lo sentenciaron en primera y segunda instancia. Por eso presentó una casación en Trujillo, pero se la negaron. El ordenamiento legal permite un último recurso que se llama queja de derecho, esta sirve para que la Corte Suprema verifique si la resolución que declara inadmisible la casación es correcta o no. Si es correcta ahí terminó todo y procede la vacancia”, explicó Carlos Talledo Manrique, abogado constitucionalista.
– Esto dice la Ley Orgánica de Municipalidades sobre la suspensión de alcaldes. Vale indicar que esta sanción es temporal, no definitiva, como es el caso de un proceso de vacancia.
– Estas son algunas de las causales de vacancia del cargo de alcaldes. La vacancia es el cese de la relación representativa, es decir, aquella que existe entre la población y su autoridad electa.
¿Qué ocurre si la Corte Suprema le da la razón?
Si la Corte Suprema acepta la queja de derecho, la Corte Superior de Justicia de La Libertad deberá admitir a trámite la casación —un recurso procesal extraordinario que la ley otorga para obtener la invalidación de una sentencia definitiva— presentada por la defensa legal de Arturo Fernández.
“El Código Procesal Penal establece que se puede presentar una casación para que la Corte Suprema vea si se ha respetado el debido proceso, si no hay una aplicación indebida de la norma, si la sala que lo condenó cometió un error al aplicar la ley, si hubo derecho de defensa. Son argumentos netamente de forma, no se analiza si es culpable o no, sino la forma en la que se desarrolló el proceso”, continuó Talledo Manrique en diálogo con BuenaPepa.
El ordenamiento legal permite un último recurso que se llama queja de derecho, esta sirve para que la Corte Suprema verifique si la resolución que declara inadmisible la casación es correcta o no.
¿Qué busca Arturo Fernández con la queja de derecho?
A decir de Carlos Talledo, el alcalde suspendido solo busca “dilatar el proceso” para no ser vacado. “La Corte Suprema suele demorar en resolver algunas causas por su alta carga procesal. Lo ideal sería que lo resuelva de una vez. Hay un tema social que trasciende al tema jurídico, mientras no se resuelva el caso de Arturo Fernández siempre habrá conflicto e ingobernabilidad de la ciudad”, declaró.
Si la Corte Suprema desestima la queja de derecho, el concejo municipal tendrá luz verde para continuar con el proceso de vacancia contra Arturo Fernández, toda vez que la Ley Orgánica de Municipalidades establece que para que esta proceda tiene que haber una sentencia consentida, es decir, que ya no cabe ningún recurso de apelación más.
“Si Arturo Fernández acude a la queja de derecho ante la Corte Suprema y esta no le favorece ya no hay otro recurso que presentar, se trata de una sentencia consentida. Ahí se abre la causal de vacancia. La Corte Suprema tiene que darle prioridad”, afirmó Talledo Manrique.
Si la Corte Suprema desestima la queja de derecho, el concejo municipal tendrá luz verde para continuar con el proceso de vacancia contra Arturo Fernández
¿Los otros juicios suman para la vacancia?
No. Aunque Fernández Bazán afronta otros procesos por difamación —el mismo delito por el que fue condenado y suspendido del cargo— estos no influyen directamente en una causal de vacancia.
“Sí le afectan, pero no suma a una vacancia. Cuando se cometen varios delitos similares la pena va en aumento. El Juzgado podría determinar una sanción ya no suspendida si no efectiva, pues vería un patrón de conducta de parte del alcalde”, expresó Carlos Talledo.
“Por el bien de la colectividad trujillana, la Corte Suprema debe resolver si la casación de Arturo Fernández fue rechazada de manera correcta o incorrecta. Así nos evitamos más problemas y más confrontación social los trujillanos”, finalizó.
