A las 5:45 horas de este miércoles 18 de setiembre, lamentablemente, la paciente de 54 años que había sido admitida en emergencia el pasado 12 de octubre en el Hospital Honorio Delgado Espinoza con diagnóstico de rabia humana, perdió la batalla en la Unidad de Cuidados Intensivos, según informó esta mañana la Gerencia Regional de Salud.
El lunes 16 de setiembre, debido a complicaciones respiratorias y neurológicas, la paciente fue trasladada a una cama de cuidados intensivos en un intento por estabilizar su estado de salud. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos del equipo médico, la gravedad de su condición resultó insuperable y la mujer falleció.
Este lamentable suceso subraya la urgencia de seguir concientizando sobre la importancia de la prevención y el cuidado responsable de mascotas, así como de mantener una pronta atención médica en casos de mordeduras que puedan comprometer la salud humana.
Rabia: una mordedura letal
Walter Oporte Pérez, quien encabeza la Gerencia Regional de Salud (Geresa) en la región, un día antes del desenlace, informaba sobre la complicada situación de la paciente, quien se encontraba en la Sala de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Honorio Delgado. Su estado de salud se agravó inesperadamente, presentando un cuadro de dificultad respiratoria.
El doctor Oporte Pérez explicó que la paciente estaba recibiendo el tratamiento adecuado y sorprendentemente empeoró después de mostrar signos de mejoría días antes.
En una entrevista para los medios nacionales el médico advirtió sobre la rabia humana, una enfermedad causada por un virus que se transmite en el Perú no solo a través de mordeduras de perros, sino también por murciélagos y otros animales silvestres en la región amazónica.
El doctor destacó la preocupante cifra de 49 casos de rabia en canes hasta el año pasado y advirtió que el virus no solo se transmite por mordeduras, sino también a través de secreciones y contacto con personas infectadas.
“El virus viaja lentamente en el cuerpo hasta llegar al sistema nervioso central, como ha ocurrido con la paciente en la UCI”, subrayó.
Para prevenir la propagación de la enfermedad, se está realizando un monitoreo de familiares y personas que estuvieron en contacto con la paciente infectada, y se planea vacunar a algunos de ellos.
El doctor Oporte también mencionó el problema de la sobrepoblación de perros en las zonas periurbanas, incluso con casas que albergan hasta 8 canes. Se están tomando medidas para abordar este tema y se enfatiza la necesidad de una respuesta intersectorial debido a la contribución de los perros en la propagación de la enfermedad.
La Geresa emitió un comunicado en el que hace un llamado a todas las personas que han sufrido mordeduras o lesiones de perros en los últimos nueve meses y no han recibido atención oportuna a acudir a un centro de salud cercano. Además, se destaca que la vacuna antirrábica humana es gratuita y está disponible en todos los centros de salud previa evaluación médica.