Hay formas de celebrar cumpleaños. En especial si son 50 años. Fecha redonda, icónica, especial. Medio siglo. Hay formas de festejar, decíamos: baile, comida, licor. Y está la manera en la que quiso vivir y vivió el artista Antonio Zegarra Ávila: una exposición en su querido Trujillo.
“Yo tengo una técnica digital particular y quería enseñar mi trabajo y festejar mi cumpleaños en mi ciudad”, dice y enfatiza “mi ciudad” con garbo y firmeza, como si zapateara al redoble de una tarola.
-A Trujillo se le quiere desde lejos.
-Sí -responde.
Antonio Zegarra vive entre Lima y Trujillo. El miércoles 10 de agosto cumplió medio siglo y clausuró la exposición Sala de espera, que abrió en homenaje a su padre, el cirujano Walter Zegarra Carranza, la cual permaneció abierta durante un mes en la Casona de Orbegoso. Por su cumpleaños, también, participó en el trabajo de su fundación, la cual desarrolla actividades artísticas como parte de la terapia de niños fisurados, es decir, el menor con el paladar o labio abierto.
“Durante el mes que estuvo la exposición, hemos realizado talleres de pintura con los niños, quienes han recorrido la casona, se les ha contado la historia del mariscal Orbegoso, de la independencia del Perú. Después, ellos han pintado lo que han visto. Luego, recibían una charla de autoestima por parte de una sicóloga también fisurada. Ha sido una experiencia alucinante”, contó.
El mismo miércoles 10, también se reunió con Rosa Hernández Bracamonte, directora del Hospital Belén, y con Dianne Erquiaga, directora para América Latina de SmileTrain, la organización más grande en el mundo que ayuda a los nacidos con labio y paladar fisurado. En noviembre se operará a unos 50 niños que durante la pandemia no han sido intervenidos.
“El niño fisurado necesita ser operado en el primer año de edad; pero —en el Belén— hay niños que tienen tres años y siguen con fisura. Mientras más tarden en ser operados, demora la recuperación, sobre todo, del habla”, detalló.
El origen
Como tantos artistas, Zegarra se inspiró para este trabajo en sus vivencias de la niñez y en su padre, quien formó a sus hijos en el oficio de la cirugía. Era común que al doctor Walter Zegarra sus hijos lo aguarden en la sala de espera mientras terminaba de atender a sus pacientes de cirugía plástica y reconstructiva en su consultorio particular y en el hospital Belén.
Fue ahí, donde Antonio aprendió viendo cómo su padre tomaba una fotografía de sus pacientes y sobre la imagen dibuja con mucha estética lo que sería su trabajo. “En general mi obra son rostros porque lo que me marcó fue la investigación que hacía mi padre con sus casos. Mi papá les tomada a sus pacientes fotos de frente, de tres cuartos, de perfil; y un poco mis personajes son así”, consideró.
Marilyn fisurada. Esta es una obra que me ha dado mucha satisfacción. Nace después de que una asistenta social del hospital Belén rechazara un afiche donde había un niño fisurado para difundir una campaña de operaciones, diciendo que podía herir susceptibilidades. Me dio mucha cólera, escuchar esa respuesta, así que tomé a la más bella del cine y la fisure, imaginando que hubiera pasado si ella hubiera nacido así. La obra esta en la sede de la Organización Mundial de Salud (OMS) en Ginebra.
Antonio Zegarra
Personajes
Zegarra ha desarrollado una técnica en la computadora, mediante la cual, en muchos de sus trabajos, ha intervenido el rostro de figuras rimbombantes como Marilyn Monroe, David Bowie, Salvador Dali, Jimi Hendrix, entre otros, a quienes ha desfigurado o transformado. Trabaja con fotografías en alta resolución, creando texturas y mezclas que forman una especie de collage digital. Imita las técnicas de pintura, acuarela, óleo, entre otras. Ponderando gestos y miradas, crea personajes con vida propia, quienes, a su vez, muestran ternura, paz, coraje, valentía y miedo.
Así es
“Estos personajes, primero, me transmiten algo. Yo los elijo porque son feos —me parece atractiva la fealdad— o son demasiado bonitos o algo de su biografía me llama la atención. Una vez que decidió con qué personaje trabajar, conecto con mis propias emociones, mis traumas, mis amores, mis sabores, mis debilidades, mis pasiones. Entonces, trabajo con las emociones tanto del personaje como con las mías”.
Mi obra
“Yo soy diseñador gráfico. Me atraía mucho los afiches del cine de los años 50 y 60 que eran pintados con acuarela. Entonces, empecé a hacer muchos de estos afiches para obras de teatro en Lima. He trabajado con muchos directores importantes, y quería que mis trabajos tengan un sello personal, quería que los personajes sean como pintados o sean acuarelas; pero yo no tengo paciencia, honestamente, para la acuarela. Busqué una técnica en la computadora que sea similar. Me maté haciéndolo, le he dedicado mucho tiempo hasta lograrlo”.
Mi técnica
“A comienzos del 2000, cuando presentaba mis obras, yo decía que lo había hecho a mano, me da vergüenza decir que lo había hecho a computadora. En ese tiempo, no entendía que estaban logrando una nueva técnica. Toda mi técnica es íntegramente en computadora. Manejo el Illustrator y el Photoshop, y es un trabajo al que le dedico muchas horas porque hay que manejar la resolución. Mis formatos son grandes —de un metro por cuarenta centímetros—, justamente para demostrar el control que tengo sobre el pixel, y que mi obra no está deformada, sino al contrario. La gente duda cuando ve la obra cree que está hecha a mano. Cuando le digo que es hecho por computadora suponen que son pinturas y me dicen ‘pintor’ y yo no soy pintor”.
¿Qué eres?
“Yo soy un artista plástico, un artista que toma todo lo que está a su alcance para expresarse”.
Reconstrucción es el rostro de David Bowie. Yo, las obras las analizo después de ser creadas y esta creo que habla de la creatividad, en los años 80. Mi padre tuvo un paciente de Virú con un tumor en el hueso Malar (pómulos) y la solución era traer una prótesis de Alemania; pero el paciente no tenía los recursos así que mi padre le reconstruye el rostro con una pelota de ping pong.
Antonio Zegarra.
Trujillo de lejos
“Cuando estamos acá no valoramos nuestra ciudad. Yo recibo muchos artistas de afuera, entonces les hago recorridos por Chan Chan, huaca del Sol, la Dama de Cao, el centro histórico. En esos acompañamientos voy aprendiendo sobre mi ciudad, y voy conociendo artistas del norte del Perú. Tenemos una expresión muy particular, las obras de los artistas del norte son distintas a lo que ves en el sur o en Lima. Es por eso que en Lima he abierto Imaginarte, un espacio cultural en donde llevo obras de los artistas del norte, para reforzar nuestra expresión. Ahora tenemos una muestra, que está hasta el 31 de agosto, de Pablo Ramírez, artista de Salpo (Otuzco). Su trabajo es maravilloso, son unos seres antropomorfos, y de una técnica bastante particular. Él se formó confeccionando fuegos artificiales para las fiestas de los pueblos de la sierra, y algunos de esos colores se ven en su obra”.
Bienal y libro
“Mi sueño es rehacer la Bienal de Arte de Trujillo que teníamos hace muchos años. Justo ayer (cuando cumplió 50 años) me encontré con algunas personas que piensan igual. Entonces, vamos a formar un comité para sacar adelante este proyecto. La bienal es muy importante para Trujillo porque somos ricos culturalmente. También, quiero hacer un libro que recolecte todas las obras de los artistas del norte, desde Áncash hasta Tumbes, incluyendo la sierra y la selva. Es un proyecto que va a tomar un par de años. Teniendo en vida a nuestro gran Gerardo Chávez, uno de los artistas más relevantes vivos del Perú y Latinoamérica, es necesario registrar a los artistas del norte del Perú”.
